A las ayudas de la Junta de Castilla y León para el alquiler de vivienda publicadas en el Bocyl el pasado 19 de octubre, que ascienden a 16,83 millones de euros, se le une ahora una nueva partida de otros 9,87 millones hasta completar 26,7 millones de euros. 

La crisis económica y la elevada inflación asfixian el poder adquisitivo de unos ciudadanos que este año han tenido que enfrentarse a una subida el 4,6% en los precios del alquiler de sus viviendas en la Comunidad.

Las ayudas aprobadas por el Ejecutivo autonómico tienen como beneficiarios las personas físicas mayores de edad con un contrato de alquiler o cesión de uso de vivienda o habitación en la que residan habitual y permanentemente. Además, los ingresos anuales máximos deben situarse entre el 0,5 y 3 veces el IPREM, es decir, entre 3.954,30 y 23.725,80 euros.

En el caso de familias numerosas o víctimas de terrorismo se aplica hasta 4 veces el IPREM (31.634,40 euros anuales), y si son familias de categoría especial o personas con discapacidad a partir del 33%, se aplica hasta 5 veces el IPREM (39.543 euros al año).

Se trata de ayudas cuyo período subvencionable es el establecido entre enero y diciembre de este año y quienes quieran beneficiarse de estas ayudas tienen desde el 1 hasta el 31 de diciembre de este año, ambos incluidos, para presentar las solicitudes.