No todo fueron malas noticias económicas en 2021 y pese a la inflación galopante, la crisis de las materias primas y Ómicron, con su enorme impacto en el crecimiento, Castilla y León vio aumentar el valor de la venta de sus bienes a otras autonomías españolas a ritmos de dos dígitos al menos en dos trimestres del ejercicio y superó por primera vez los 6.000 millones en tres meses, los de julio a septiembre, los últimos publicados hace unos días por el proyecto C-Intereg.

El informe recogido por Ical, precisa que Castilla y León comercializó productos durante el tercer trimestre del por importe de 6.158 millones de euros, el mayor valor de la serie por trimestres que publica Ceprede, y que representan un importante incremento interanual del 18,9 por ciento en relación al dato de 2020 (5.177 millones), cuando también habían crecido un seis por ciento respecto a 2019.

El documento también pone de relieve un valor de las exportaciones en el segundo trimestre del ejercicio de 5.866 millones, en niveles máximos entonces para ese periodo, que se dispararon un 22,5 por ciento. Por el contrario, entre enero y marzo, en el inicio del año, sumaron 4.687 millones estas ventas, y supusieron un descenso del 1,8 por ciento respecto a 2020, cuando aún no había estallado con toda su virulencia la pandemia de la COVID y la economía estaba animada sin saber lo que llegaba.

Elevadas importaciones y saldo

Del otro lado, el valor de las importaciones de la Comunidad, también registraron valores récord, y en el tercer trimestre se situaron en 6.214 millones de euros, con un crecimiento del 25,8 por ciento. El trimestre anterior también avanzaron a dos dígitos, un 12,4 por ciento, hasta los 5.668 millones; y en el primer trimestre se incrementaron un 6,9 por ciento, con 5.735 millones.

Estos datos revelan que la balanza comercial con el resto de España fue deficitaria en el tercer trimestre en 57 millones de euros; un dato que alcanzó los menos 1.048 millones en los tres primeros meses del año, pero que en el segundo trimestre registró un superávit de 198. En el global de los tres trimestres de estudio, el resultado fue un déficit de 907 millones, al contrario de lo que ocurre con la balanza exterior, marcada por el superávit (5.090 millones de euros hasta noviembre).

Consumo interno y peso

Por lo que se refiere al consumo interno de bienes en la Comunidad, el comercio intrarregonal, el comportamiento también fue muy favorable en el segundo y tercer trimestre del año pasado, cuando se elevó a valores también máximos, con 3.424 y 3.408 millones de euros, respectivamente, con incrementos del 13,4 y 9,3 por ciento, en cada caso. El primer trimestre comenzó con una desaceleración del 5,2 por ciento, hasta los 2.912 millones, en relación a 2020, con pandemia todavía.

Peso en España

El estudio comercial recopilado por la Junta en su base estadística, precisa el peso de Castilla y león en los flujos de exportaciones de bienes de las autonomías entre sus respectivos territorios, y pone de manifiesto que en el tercer trimestre del año, sólo superaron a la Comunidad en ventas fuera de sus fronteras, Cataluña y Andalucía.

En concreto, Castilla y León supuso entre julio y septiembre, el nueve por ciento del total de la ventas de las autonomías españolas, que ascendieron a 68.119 millones de euros, y solo fue superado por Cataluña, que encabeza el ranking a mucha distancia, con el 17,4 por ciento; y Andalucía, con el 12,8 por ciento del total del comercio interregional.

Más modesta es la posición de la Comunidad, si se suma el dato de comercio intrarregional e interregional, ya que supone solo el 2,9 por ciento de los 116.064 millones que se movieron en esos meses, y ocupó la quinta posición del ranking, por detrás de Cataluña, 9,6 por ciento; Andalucía, 5,5 por ciento; Valencia, cinco por ciento; y Galicia, 3,3 por ciento.