Los mercados se encuentran a la espera de ver cómo reacciona el consumidor medio español tras anunciar el INE un nuevo aumento del IPC, que se sitúa ya un 5,6% más caro que en noviembre de 2020.

El consumo de las familias, a las puertas de la campaña de Navidad puede verse agravado por una carestía en el precio de la cesta de la compra que golpea de nuevo su poder adquisitivo.

Los precios siguen su escalada sin visos de cambio de tendencia, con un nuevo máximo que no se alcanzaba desde 1992.

Sin embargo, y aunque es el noveno mes consecutivo que el IPC se mantiene al alza, sí es cierto que este aumento en noviembre es sólo dos décimas superior al registrado en octubre y el incremento más leve desde el pasado mes de julio.

El comercio no ve la luz al final del túnel

Para el comercio este nuevo incremento del IPC y la posibilidad de que la Administración aplique nuevas restricciones ante el avance de la sexta ola, supone un palo más en la rueda de la recuperación económica de sus negocios.

Adolfo Sáiz, presidente de Conferco (Confederación de Comercio de Castilla y León), advierte de que los márgenes de que disponen el pequeño comercio y los autónomos para no repercutir ese incremento del IPC en el consumidor final, "es muy pequeño" y que este nuevo dato hace que cada vez vean "más lejos la luz al final del túnel".

Además, Sáiz advierte del sobrecoste que supone para los autónomos, además, la subida de ocho euros aprobada por el Gobierno y con aplicación desde el próximo mes de enero.

No obstante, desde Conferco esperan que "la campaña de Navidad anime al consumidor a sacar al mercado parte del ahorro que se produjo durante la pandemia", de manera que permita a los negocios recuperarse a través de un mayor índice de transacciones comerciales.

CCOO de Castilla y León exige medidas más contundentes

Por su parte, el secretario de Acción Sindical y Negociación Colectiva de CCOO en Castilla y León, Fernando Fraile, considera que el Gobierno debería tomar "medidas más contundentes dirigidas a paliar la escalada de unos precios que lastran el poder adquisitivo de los trabajadores".

En este sentido, Fraile anima, además, a aplicar políticas "expansivas" en un momento de "indudable crecimiento económico", si bien es cierto que las principales instituciones económicas así como Bruselas han venido rebajando las previsiones de subida del PIB nacional.

Fraile ha aprovechado, además, para exigir que se revise por qué el Ingreso Mínimo Vital sigue sin llegar a más del 70% de las familias que lo solicitan, quince meses después de su aprobación.