Maite Galdeano y su particular comportamiento asustaron a Pablo, primer expulsado oficial de Gran Hermano 17 y primer miembro del contraclub del que la madre de Sofía, Mª José Galera y Amor Romeira formaban parte.

El abandono del zamorano del concurso ha provocado el cierre de esta estancia secreta y aislada de la casa de Guadalix de la Sierra, al menos de manera provisional. El motivo principal de la clausura de este espacio se debe a que la función del contraclub no será cumplida esta semana al no haber concursantes de GH 17 habitando en ella a los que asesorar.

Amor Romeira, María José Galera y Maite Galdeano fueron enviadas a casa en plena madrugada a espera de que se produzca una nueva expulsión con la que este nuevo giro del formato vuelva a cobrar sentido.

Así fue el abandono de Pablo del anticlub

Maite entró a la casa como una de las mentoras del contraclub para ayudar a los primeros expulsados del reality, pero hizo todo lo contrario. Pablo era el primer expulsado y se encontraba de golpe con tres nuevas compañeras de habitación: Maite, Amor y María José Galera. El concursante no lo pudo soportar.

A los pocos minutos de explicarle que tenía una segunda oportunidad, Pablo entraba en el confesionario para pedir su salida. El concursante agobió por el comportamiento alocado de Maite, que ya desquició a sus compañeros de GH 16.

Con un ataque de ansiedad y confesando que no tiene dinero para pagar la multa que deben pagar los concursantes que abandonan, Pablo lloraba ante la voz del Super. La voz de Gran Hermano intentaba tranquilizarle, haciéndole ver que no tendría que pagar ningún dinero si se marchaba.

"Una enseñándome el culo y otra diciendo que tenía pito", decía Pablo entre sollozos en el confesionario. "Este era mi sueño, pero no puedo", empezó diciendo Pablo al Super para pedir que le dejen salir de la casa. 

Amor y María José, que vieron la escena, se han enfrentado a Maite y la guerra ha estallado a los pocos minutos de su entrada. Ambas exconcursantes recriminaron a Maite su comportamiento y le han pedido que ayude al joven ya que ellas tres están allí para aconsejar y no para agobiar a los que van llegando al contraclub.

Finalmente, y a pesar de que la organización ha intentado convencer al concursante, Pablo no ha aguantó la presión y decidió abandonar el programa y su participación en el reality. De esta forma, el contraclub se queda sin argumento al no tener a ningún expulsado entre sus paredes y tendrá que esperar una semana para volver a reabrir sus puertas.