Había dudas sobre si la tercera edición del Benidorm Fest iba a tener una buena acogida en audiencias tras el bajón que vivió el año pasado, cuando Blanca Paloma y su Eaea conquistaron al público presente en el Palacio de los Deportes L’Illa de la ciudad alicantina. La victoria de Nebulossa y su Zorra han resultado premonitorios, dado que la audiencia ha dado la sorpresa y el Benidorm Fest 2024 obtiene un seguimiento mucho que la edición anterior.

Según los datos de Kantar Media, recogidos por las consultoras Dos30', Barlovento Comunicación y GECA, la final de la tercera edición del Benidorm Fest obtiene un 16,6% de cuota de pantalla y 1.977.000 espectadores. De esta forma, logra 1,9 puntos más que la final de 2023, que firmó un 14,7% de share, y congrega a 90.000 televidentes más, dado que la anterior final tuvo 1.887.000 seguidores.

La final logra el máximo de datos de esta edición 2024, dado que la primera semifinal firmó un 10,8% de share y 1.005.000 espectadores, mientras que la segunda alcanzó el 10,5% de cuota y 1.039.000 televidentes. El resultado final arroja que el Benidorm Fest gana en cuota de pantalla en sus tres galas frente a la edición de 2023, perdiendo sólo ligeramente seguimiento en su primera semifinal en su media de espectadores (1.005.000 frente al 1.044.000).

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Datos más que positivos que, además, hunden las cifras de audiencia de la competencia. La segunda entrega de Atrapa un millón se conforma con un 10,1% de share y 1.220.000 espectadores, lo que se traduce en 2,4 puntos menos de cuota respecto al estreno y la pérdida de 166.000 seguidores. Tampoco le ha ido bien a Bailando con las estrellas, que se queda en un 9,9% de cuota y 900.000 televidentes, lo que significa un descenso de 1,1 puntos y 47.000 televidentes.

El descenso, más ligero en el caso de Bailando con las estrellas y un poco más acusado para Atrapa un millón, demuestra que el Benidorm Fest se ha convertido en un evento que marca expectación y un efecto arrastra propio, en la línea de los Premios Goya (que justo serán el sábado de la semana que viene) o la propia final de Eurovisión. Una demostración de consolidación que ha venido ayudado por la incertidumbre que ha habido en toda la edición respecto al ganador de este año.

Y es que no ha habido un favorito claro ni entre el público ni entre el jurado. El televoto y el voto demoscópico demostraron que había cierta predilección por Jorge González, Nebulossa y Angy Fernández, mientras que el jurado parecía decanta en las semifinales por St. Pedro, María Peláe o Almácor. Demasiados nombres que mostraron que el ganador no se conocería hasta saber las puntuaciones del televoto.

Y es que, justamente, hasta que no se dieron a conocer los puntos del televoto no pudo irse la incertidumbre, dado que el voto del público demoscópico dejó a St. Pedro a sólo dos puntos de Nebulossa y fue Jorge González el que obtuvo mayor puntuación en esta ronda. A ello se suma que el jurado dio la misma puntuación tanto al cantante canario como al dúo valenciano, dejando al público libre para decidir quién ganaba. Una expectación que se ha traducido en una mejora notable de audiencias y que consolidan a un formato que, sin duda, se espera ya con ansia para 2025.