Este lunes, En el nombre de Rocío abordó la creación del museo de Rocío Jurado y todas las circunstancias que retrasaron su apertura. Durante mucho tiempo se señaló a Rocío Carrasco como la responsable de que esta instalación no abriese sus puertas, pero ella ha demostrado que no era así. La hija de la Jurado y Pedro Carrasco aprovechó su visita al plató para, de paso, ajustar algunas cuentas con quienes han vuelto a cuestionar la veracidad de las pruebas que ha aportado.

Pero no sólo la propia protagonista ha respondido a los periodistas que han cargado contra ella, el programa también ha puesto en evidencia a estos profesionales que llevan meses cuestionando el relato de Rocío y el trabajo de la productora La Fábrica de la Tele. 

En concreto, el formato se ha centrado en las críticas que en los últimos días han vertido un youtuber de la 'marea azul' y el locutor Federico Jiménez Losantos. "Desde el estreno de esta serie documental, algunos periodistas y medios de comunicación han hecho de la mentira sobre nosotros una garantía para conseguir audiencia, esta es la última", introducía Jorge Javier Vázquez antes de emitir un vídeo con la última gran mentira del bando anticarrasquista.

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En la pieza, el programa relata cómo el periódico La Vanguardia publicó que la defensa de Ortega Cano anunció una querella contra Rocío Carrasco basada en un informe caligráfico. Así, el torero y su hija, Gloria Camila Ortega, acusaban a Rocío y a la docuserie de falsificar un manuscrito de Rocío Jurado.

Para defenderse de estas acusaciones, el programa entrevistó a una experta caligrafista que debía estudiar si el análisis en el que se basaba la supuesta querella cumplía con los requisitos técnicos de la pericia caligráfica.

Tras publicarse el testimonio de la perito, la maquinaria mediática se activa para acusar al programa sin aportar ningún tipo de prueba, de sacar una conversación grabada un año antes. "Nos acusan de mentir cuando son ellos los que aportan datos falsos", asevera la voz en off en el vídeo emitido este lunes.

"Para contestar a la denuncia sacan una información de un año antes. No puede ser que no solamente se delinca, sino que se den pruebas falsas, mentiras flagrantes para triturar a un informador que ha cumplido con su obligación", dijo Jiménez Losantos en su programa de radio.

Pero la realidad, tal y como ha demostrado el formato, es que se pusieron en contacto con la experta el pasado 20 de octubre, un día después de que se publicara la noticia de la supuesta querella contra Rocío Carrasco. El equipo del programa contactó con la caligrafista a raíz de la noticia y el 21 de octubre se grabó esa entrevista.

"Ni Rocío Carrasco ni este programa tienen constancia legal en ningún momento de que exista ninguna querella", explica el vídeo. "¿Qué interés tiene un locutor de radio en hacerse eco de unas declaraciones falsas?", se pregunta finalmente el programa, antes de dar paso a Rocío para responder a todas las acusaciones.

"Cuando una persona pone una querella, hasta que no está admitida formalmente por el juzgado que toque, la persona que es querellada, que en este caso soy yo, no tiene conocimiento oficial", aclaró Rocío Carrasco, rematando con un "mamá ni miente ni se calla".