Según fuentes próximas a la investigación de la trama liderada por el productor de televisión y ventrílocuo José Luis Moreno, éste seducía a inversores con la promesa de salir en los créditos y participar en los beneficios de series y programas de televisión que alcanzarían prestigio internacional.

Entre los ejemplos se encontraba Reinas, virgen y mártir, una serie que TVE emitió en 2017 con mucha polémica y que el empresario siempre se empeñó en vender como un proyecto de éxito coproducido con la BBC.

"Después de la producción de Queens, que ha sido un éxito mundial ahora mismo en 24 países y creciendo, y que aquí fue Reinas y TVE coprodujo, ahora seremos pioneros en las producciones en inglés en España y vamos a hacer San Francisco de Asís", comentaba precisamente en el vídeo de presentación de Resplandor y tinieblas, la serie para la que consiguió convencer al argentino Alejandro Roemmers para que invirtiera 30 millones de euros.

Sin embargo, parece que este empresario no estuvo muy atento a lo que se publicaba en la prensa. Y es que nada podía estar más lejos de la realidad. Ni esta serie estuvo coproducida por la BBC, ni ha sido un éxito mundial, ni tan siquiera triunfó en España. De hecho, consiguió en su día el dudoso honor de ser el segundo peor estreno de una serie en La 1. Su último capítulo fue apenas visto por un 6,2% y 973.000 espectadores.

También hicieron oídos sordos en TVE a las continuas denuncias de la prensa cuando decidieron contratar a Moreno, a pesar de que la ley impide a la radiotelevisión pública contratar a empresas que tengan deudas con Hacienda. El ventrílocuo debía por entonces 3,4 millones de euros al Fisco.

"Cualquier contrato que hace TVE está por libro. Debe estar al día en el pago a Hacienda", afirmaba en la Comisión Mixta de Control Parlamentario de RTVE el presidente de la Corporación, José Antonio Sánchez, quién al igual que Moreno apareció en su día en los papeles de Bárcenas.

Además, según fuentes consultadas por BLUPER, a la hora de discutir un proyecto en RTVE, sólo se facilita a los consejeros el nombre de la productora con la que se va a trabajar. Es decir, el nombre de Moreno no apareció en ningún momento en la reunión de aprobación de esta serie.

De esta manera, burlando la ley, los directivos de la cadena siempre pudieron defender que habían contratado los derechos de emisión de Reinas con Indiana Pictures S.L, un productora que se encontraba "al corriente de sus obligaciones tanto tributarias como con la Seguridad Social", cuyo administrador único era Jean Paul Jongen Pascal y sólo contaba con dos empleados. Pascal había sido guionista de series como Ana y los 7, Maitena: Estados alterados y Al salir de clase, pero desde 2008 no aparecía ningún trabajo registrado. 

A pesar de ello, el ventrílocuo insistía en su autoría. "Esta serie es de TVE y mía", decía cuando desde BLUPER le preguntamos por ello. "TVE participa en la serie con los derechos en España y luego también en su comercialización. Entramos en esa producción internacional con más partners”, matizaba el director de ficción de TVE, Fernando López Puig. Y es que no era lo mismo coproducir que comprar derechos.

Pero el empresario seguía sacando pecho de su obra y alardeando de la envergadura de su presupuesto. "Es una de las producciones más ambiciosas que se han hecho en los últimos años, dejando a un lado series como Juego de tronos”, decía Moreno, que afirmaba que la serie tenía un coste de 2,1 millones de euros por capítulo. 

En los títulos de crédito aparecía además la empresa Crystal Forest, propiedad de Moreno, como encargados de la producción de la ficción y BLUPER pudo constatar que desde la productora Kulteperalia S.L, que decía al fisco 1.891.661 euros, se estaban solicitando "maquilladores/peluqueros expertos en pelucas" para una importante serie de televisión de época.

Desde BLUPER solicitamos entonces a Transparencia los contratos de esta producción. Sin embargo, la cadena pública se negó en aportar esta información porque "perjudicaría de forma directa sus intereses comerciales".  

"Divulgar la información solicitada perjudicaría de forma directa los intereses comerciales de RTVE ya que tanto sus competidores como sus proveedores tendrían acceso a una información estratégica de RTVE", se defendían la Corporacion.

Finalmente, gracias a que en febrero de 2018 se conocieron las cifras del informe de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), por fin pudimos saber que la ficción costó tres millones de euros a RTVE, 501.672 euros por cada uno de los seis capítulos que estuvo en antena.

Sin embargo, en el documento sobre el gasto en encargos de programas de televisión entre 2015 y 2019 colgado en Transparencia de RTVE, no aparecía el contrato rubricado con Crystal Forest S.L, la productora de Reinas. Desde la Corporación, sin embargo, explicaron que en este documento sólo se han puesto las productoras que han superado los 2 millones de euros. 

Como anécdota de esta serie recordar también que Martin Czehmester, un exactor porno de cine gay habitual de las producciones de Moreno, aparecía en la ficción realizando un pequeño cameo.