Alicante

En 2019 nacieron 37.428 bebés fruto de las técnicas de reproducción asistida realizadas en España. De ellos, 33.500 dieron a luz en el territorio nacional, lo que supuso el 9,5% de los nacimientos totales, "la cifra de natalidad más alta" de la medicina reproductiva en nuestro país, dijo a finales de septiembre Fernando Prados, embriólogo de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y coordinador del último informe del Registro Nacional de Actividad del sector

La tendencia al alza de estas técnicas contra la infertilidad también se ha notado en las pacientes extranjeras que vienen a España a quedarse embarazadas. Una vez logrado, parieron en sus países de origen a 3.928 bebés, aunque este dato incluye también a las españolas que se sometieron a estos tratamientos en España y tuvieron a sus bebés en el extranjero, donde residían. 

No obstante, cabe reseñar que por primera vez los tratamientos de fertilidad cayeron en España un 1'3% con respecto a 2018 aunque, eso sí, nacieron más bebés, según la información facilitada por 311 centros públicos y privados repartidos por todo el país. De ellos, 25 (10'3%) están en la Comunidad Valenciana, 4 son públicos, una de las regiones con más clínicas del país y donde se realizaron 23.710 tratamientos de fecundación 'in vitro', el 16% del total, y 3.789 (11,6%) de inseminación artificial.

Alicante, puntera

En Alicante, particularmente, existen numerosas clínicas privadas, además de la unidad del Hospital General de Alicante, de carácter público. En la provincia destacan algunas de ellas, como la Unidad de Reproducción de Vistahermosa, que ha cumplido 38 años. Desde aquí se expandieron a 12 ciudades españolas, dos mexicanas y una en Nicaragua, explican fuentes de la compañía. 

¿Qué porcentaje de la clientela es extranjera? Concretamente en Alicante, un 50% de los pacientes son internacionales, responden. ¿Y en otras provincias? Allí son mayoritariamente nacionales. Suelen acudir a este centro de 20 nacionalidades, contando con norte y sur de Europa, EE.UU, Canadá y Australia, siendo las mayoritarias Francia, Italia y Reino Unido

Una sanitaria atiende a una pareja que se quiere someter a un tratamiento de fertilidad.

Cifras similares presentan en la clínica Vithas de Alicante donde, de enero de este año hasta ahora, el 45% del total de pacientes han sido internacionales. Las primeras son italianas, seguido de las francesas e inglesas. Suelen presentar un perfil similar al de las españolas, de 38 a 50 años, aunque con respecto a las internacionales, el tratamiento que más se realiza es el de ovodonación (para mujeres que no pueden gestar un embrión) ya que en sus países o está prohibido o hay larga lista de espera; se suele utilizar en mujeres solteras o lesbianas. 

Precisamente, la nula lista de espera que existe en el sector privado es uno de los motivos por los que el público no entra a competir. De hecho, en la Unidad de Reproducción Asistida del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital General Universitario de Alicante es infrecuente que acudan extranjeras, sí en todo caso a las residentes en la provincia que tienen los mismos derechos que las nacionales. Esta unidad "atiende de forma mayoritaria a mujeres nacionales y, en menor medida, a residentes. La población extranjera no es un perfil que acostumbre a demandar nuestra atención", responden fuentes consultadas. 

El tabú de Italia

Lo cierto es que, en comparación con Europa, España ocupa una posición privilegiada en medicina reproductiva, respaldada legalmente y apoyada por una sociedad que ve con buenos ojos que se favorezcan las técnicas de reproducción asistida, siendo a la postre un país de referencia mundial en avances técnicos que permiten que la tasa de éxito sea de las más elevadas. 

En contraposición se encuentran vecinos como Italia o Francia. En el país transalpino "todavía existe un fuerte tabú" relacionado con la infertilidad, reconoce Olivia (nombre ficticio), una madre que acudió a un centro de la Comunidad Valenciana hace 4 años para quedarse embarazada. "Estamos muy retrasados en este y en otros temas", lamenta. 

¿Por qué España? "Porque allí me ofrecían lo que no tenemos aquí", resume, sin obviar el precio, "en Italia además me costaba el doble". Al final, Olivia se volvió a su país satisfecha. "El trato fue de 10, nos pusieron todo tipo de facilidades y nos explicaron todo muy bien". De hecho, en este país hasta 2015 no estaba permitida la fecundación heteróloga, por lo que solo podía ser mediante el esperma y el óvulo de la pareja. "La fecundación 'in vitro' sigue sin estar permitida para las viudas, solteras u homosexuales", denuncia esta madre.  

Según datos de 2018, las italianas eran un 20% del total de extranjeras sometidas a tratamiento en España. Para ellas, las semejanzas físicas y culturales con los españoles, de cara a buscar a un donante español, es otro factor a tener en cuenta a la hora de decantarse por nuestro país, apuntan desde Clínica Vithas Alicante. A este respecto, cada vez son más las clínicas de medicina reproductiva de España que abren sedes en Italia para atender las primeras consultas, aunque muchas acaban viajando a España a través de estas empresas ante la falta de donantes.  

Francesas e inglesas

En Francia la situación hasta hace poco no era más halagüeña. Cada año, según cifras del gobierno galo, unas 2.000 mujeres viajaban a España o Bélgica en busca de la maternidad. Pero la situación puede que cambie después de que la Asamblea Nacional francesa aprobara una ley que no veta a homosexuales y garantiza la reproducción asistida a todas las personas con capacidad reproductiva, siempre que tengan menores de 43 años.

¿Lo notará España? Seguramente, pero siempre quedará el precio y el factor lista de espera como argumentos a tener en cuenta, sobre todo para una clientela que lo que precisamente no tiene es tiempo para someterse a estos tratamientos. 

Por último, en Reino Unido, la tercera nacionalidad que más abunda en Alicante, no se da una restricción legal como las que históricamente han existido en Francia o Italia, sino que más bien se produce de nuevo la cuestión cultural pues allí, la donación de esperma es muy baja y la lista de espera muy alta. 

Brexit y pandemia

¿Han notado las clínicas alicantinas el efecto Brexit? "En estos momentos, la pandemia ha sido lo que más hemos notado y no podemos hacer todavía un comparativo con el Brexit pues lo ha enmascarado la crisis sanitaria", responden desde Vistahermosa. 

Aún con las restricciones de vuelo que ha habido este año, en Vithas aseguran que el porcentaje de internacionales "ha sido incluso superior" a años anteriores. Para facilitar el proceso, han incremento las consultas por videoconferencia, que ya venían ofreciendo, "pero que ahora son claves para llegar al paciente extranjero", añaden en Vistahermosa.

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