Alicante

A unos pocos minutos de la ciudad de Alicante en coche existe un conjunto montañoso ideal para la práctica del senderismo por su fácil acceso y maravillosas vistas. Se trata del Maigmó, que junto al Cid, l'Argüenya, la sierra de Castalla, la sierra del Frare y la sierra del Caballo, constituyen un entramado de vías y senderos ideales para recorrer en primavera u otoño, cuando las inclemencias meteorológicas no impiden su acceso.

Para los menos acostumbrados al senderismo, el inicio de la escalada es ya de por sí una excursión muy recomendable. Se trata del Balcón de Alicante, un gran mirador con zona recreativa y parking del que parten muchos de estos senderos. Desde su terraza se puede observar todo el litoral de la comarca de l'Alacantí y los picos cercanos.

Para acceder desde Alicante, el excursionista debe acceder a la A-77 que une la capital de la provincia con Alcoy, hasta la salida de Tibi (salida 480), a alrededor de 26 kilómetros de la capital. A partir de ahí, todo el camino está muy bien señalizado por la CV-805, la CV-815 y la CV-8151. Se trata de alrededor de 7 kilómetros por una carretera de montaña muy estrecha y revirada, pero bien asfaltada en la que hay que tener cuidado con los senderistas y ciclistas.

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Tras muchas pendientes y curvas se llega a una gran explanada con el parking gratuito y la terraza, merenderos e indicaciones de a los principales caminos que salen desde la zona recreativa. El mirador se sitúa a 980 metros de altitud.

Mirador del Balcón de Alicante.

Como explica la web de Turisme de la Generalitata Valenciana, el senderista se encuentra con "un núcleo natural de vital importancia para los numerosos hábitats y especies de flora y fauna que habitan en estas tierras del interior de la montaña mediterránea".



"Su ubicación juega un papel fundamental en la conectividad entre la parte montañosa de las sierras subhúmedas del norte de la provincia de Alicante, con las sierras y altiplanicies semiáridas del sur de Alicante", añade.

Ascenso al Maigmó

Desde el Balcón de Alicante al pico del Maigmó, de 1.296 metros de altura, se tarda entre media y una hora dependiendo del estado físico y edad del excursionista. Es una subida exigente para la que se requiere calzado adecuado ya que hay muchas pequeñas piedras que favorecen los resbalones. Tampoco está de más ayudarse de bastones.

Algunos de los paisajes de la montaña de Alicante del ascenso al Maigmó.

No se trata de un paseo. Hay zonas, sobre todo cerca de la cumbre, donde hay que tener especial cuidado y una buena forma física para hacer pequeñas "trepadas". Pero durante los 300 metros de desnivel las vistas son espectaculares y el excursionista puede elegir llegar hasta donde se sienta seguro sin necesidad de hacer sobreesfuerzos. 

En el tramo final, de roca, la subida se complica y el camino aparece menos trazado. De hecho, ya en la cumbre, para acceder al vértice geodésico marcado, el nivel de dificultad aumenta. En la cumbre el paisaje de toda la provincia es ya visible si las condiciones climatológicas lo permiten.

Indicaciones de los ascensos al Maigmó.

Pozos de nieve

Otra posibilidad de excursión, más larga pero notan exigente por el ascenso, es a los pozos de nieve de la zona. El más alejado es el Pou neu Planisses (1.037 metros de altura). Más cercano está el Pou de neu del Maigmó (904 metros de altura). Más alejado y no en esta ruta está el Pou de neu de Carrascalet (1.209 metros de altura), ya en el término municipal de Castalla. 

Mapa con los caminos a los pozos de nieve.

Los pozos de nieve han servido durante siglos para conservar el hielo que se producía de forma natural o artificial durante los inviernos en las montañas alicantinas y comercializarlos en las estaciones de más calor.

Ciclismo

En 2021, la Vuelta Ciclista a España eligió el Balcón de Alicante como meta inédita hasta entonces. El ciclista australiano Storer ganó esta séptima etapa. Según la crónica de EL ESPAÑOL, fue "el más fuerte de una imponente fuga que contó con nombres muy importantes como los de Sepp Kuss o Romain Bardet".

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El recorrido, aunque muy exigente, siempre tiene algún aventurero aficionado capaz de enfrentarse a un ascenso de 8,4 kilómetros por carretera revirada, y con un desnivel de 552 metros desde el inicio en la salida de Tibi, pendiente media del 6,2% y máxima del 14%.