Ahora que las temperaturas han empezado a bajar, salir a pasear al aire libre se convierte en un plan todavía más apetecible. Y qué mejor manera de hacerlo que visitando ferias y mercados donde descubrir piezas únicas hechas a mano.
Para quienes buscan experiencias diferentes y productos con personalidad, la Feria de Arte y Artesanía de Autor del Puerto de Jávea es una cita ineludible este fin de semana.
La feria se celebra en el paseo marítimo del puerto de Jávea, siempre que el tiempo acompañe, y ofrece un ambiente perfecto para disfrutar de la creatividad local con unas vistas impresionantes al mar.
Durante septiembre y hasta el puente de octubre, los puestos estarán abiertos los sábados de 19 a 23 horas y los domingos de 11 a 15 horas, cambiando posteriormente al horario de invierno. Ambos días de 11 a 15 horas, pudiendo extenderse un poco más.
Lo que hace a esta feria especial es que todo lo que se vende está hecho a mano por artesanos de verdad. Además, aceptan pedidos personalizados para quienes buscan algo que no encuentran en otros lugares.
Los propios artesanos recomiendan complementar la visita con un paseo por el puerto, la Iglesia de la Virgen de Loreto, -una construcción moderna con forma de barco-, y una parada en alguna de las terrazas del entorno para "reponer fuerzas".
Los artesanos actualizan la información de la feria a través de sus redes sociales.
Más allá de la feria
Si ya estamos en Jávea, lo ideal es aprovechar para recorrer sus encantadoras calles y rincones. Este municipio alicantino, bien protegido por el Montgó, combina playas, calas y un casco urbano lleno de luz y color que enamoran a propios y visitantes por igual.
Según Turismo de la Comunitat Valenciana, Jávea "lleva años sorprendiendo por su belleza, su luz y los colores que la rodean", convirtiéndola en un destino perfecto para escapadas de fin de semana.
Playas y calas de ensueño
Entre sus atractivos destacan las calas, algunas de ellas imprescindibles para quienes aman la naturaleza. La Playa del Arenal es ideal para quienes buscan servicios y cercanía con el núcleo urbano, mientras que calas como Portitxol, con su islote y su puerta azul, o Granadella, Sardinera y Tangó, ofrecen paisajes más vírgenes y fotogénicos.
Rutas y miradores
Pero Jávea no es solo mar. Pasear por sus calles es una delicia y permite descubrir rincones llenos de historia y color.
Desde el Mirador de les Pesqueres hasta la ruta completa de los miradores, donde se encuentran monumentos como la Séquia de la 'Noria', cada paseo reserva sorpresas.
Iglesia San Bartolomé, Jávea
Para los más aventureros, la Cova Tallada es un destino obligado.
Gastronomía para todos
Además, la localidad cuenta con una amplia oferta gastronómica. Desde arroces marineros y guisos de pescado hasta la gamba roja o el pulpo seco, los restaurantes de Jávea permiten reponer fuerzas tras un paseo por la feria o por las calas y miradores.
Comer frente al mar, con productos frescos y recetas tradicionales, completa una jornada perfecta en este rincón de Alicante.
