192 fallecidos de las 228 personas que murieron en la dana de Valencia hace casi un año, residían o estaban en los municipios por los que pasaba el barranco del Poyo. Sin embargo, en su declaración judicial, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, cuyo único mérito para acceder al cargo fue haber sido concejal de Cultura por el PSOE en Titaguas, aseguró que la ausencia de información sobre este barranco al Cecopi durante las 16.15 h a las 18.43h, fue porque esa información "no es relevante"
Pasadas las 17:00, ya se estaban registrando fallecimientos en la zona. Sin embargo, Polo no ha salido imputado de su declaración judicial, que hizo como testigo.
"No era relevante esa información porque no había capacidad de reacción a partir de esos datos", manifestó el presidente de la CHJ. Entonces, ¿cómo es posible que se emitiese antes el mensaje de alerta (que es por lo que se está juzgando a excargos autonómicos) si no se conocía la información?
Mi admirado Francis Bacon -por su utopía Nueva Atlántida, que durante el Renacimiento culminó la trilogía iniciada por Tomás Moro y seguida por Tomás Campanella-, ya estableció al inicio de la Edad Moderna que "scientia potentia est" (el conocimiento es poder" o la "información es poder").
Sin información es imposible analizar cualquier situación, y mucho menos, actuar para evitar sus efectos. Si tú no sabes qué está sucediendo en el barranco del Poyo, difícilmente vas a gestionar una riada tan brutal como la de octubre de 2024 en Valencia.
El Gobierno de la Generalitat Valenciana cometió muchos errores esa tarde. Errores que ha reconocido públicamente el propio presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y que les ha costado el cargo a una consellera y a un secretario autonómico de Emergencias.
Es público, y más después de las declaraciones judiciales de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, y del presidente de la CHJ, Miguel Polo, que el Gobierno de Pedro Sánchez cometió aquella tarde muchos errores. Errores que se multiplicaron en su fallida capacidad de respuesta en los días siguientes. Solo que en sus filas nadie ha dimitido.
Los responsables de los barrancos en España son las confederaciones hidrográficas que dependen del Ministerio para la Transición Ecológica. Miguel Polo participó en la reunión del Cecopi el 29 de octubre de forma telemática y no presencial, aunque su presencia era obligatoria según el protocolo de emergencias. Y cuando va a declarar ante la juez, confirma que hubo un apagón informativo sobre el barranco del Poyo y que en cualquier caso "no había capacidad de reacción". No hay más preguntas, señoría.