Elche

Un pavimento que absorbe la contaminación ambiental hasta en un 30% y que también ayuda a reducir la contaminación acústica y contribuye a eliminar virus y bacteriasBautizado con el nombre de 'Oasis', este proyecto desarrollado por la empresa de Elche Synthelast S. A. con la colaboración de la empresa murciana Reciclaje de Neumáticos y Caucho (RNC), ha sido escogida entre más de 200 iniciativas de todo el mundo en el prestigioso Concurso Internacional Escobas 2022, haciéndose con el premio en su XVIII edición.

[La contaminación urbana causa 10 millones de muertes prematuras cada año]

Su nuevo y patentado material 'Idsun' combina reciclado de neumático con un agente fotocatalíco especialmente diseñado, explica a EL ESPAÑOL De Alicante Pablo Candela, adjunto a dirección de la mercantil murciana tras aclarar que llevaban desarrollándolo "unos cinco años". El resultado es un pavimento que, instalado como suelo continuo y en presencia de luz solar, "retiene" la contaminación de monóxido y dióxido de nitrógeno presente en el aire y "la transforma en sustancias no nocivas para la salud".

Su aplicación está pensada para instalarse en parques infantiles, carriles bicis, superficies deportivas bancos, paradas de autobuses, párquines o en los parterres de los árboles de la ciudad. Su presencia ayuda a reducir "entre un 25 y un 30%" la contaminación ambiental, según han certificado los laboratorios externos, así como hasta 10 puntos de decibelio la contaminación acústica, asegura Candela en conversación telefónica. 

El parque murciano, en su inauguración.

¿Y por qué no en el asfalto de las carreteras? Le preguntamos. "No es viable por los tiempos de secado", responde. "El asfaltado puede secarse en unas 3 horas, pero nuestro pavimento no se hace en caliente, se hace en frío y tardaría en estar listo entre 24 y 48 horas, siendo inviable que una vía esté tanto tiempo parada hasta que se reabra al tráfico", aclarada. 

Los pasos seguidos

Cuenta este portavoz que, tras ser financiado el proyecto 'Oasis' por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial del Ministerio de Economía y Competitividad en 2017, fueron dando pasos para comprobar si era posible conseguir la descontaminación atmosférica en áreas infantiles instaladas en los municipios. 

Con la colaboración del centro AITEX, fueron cumpliendo las diferentes pautas que les exigían, y cuando vieron que, tras realizar varios ensayos, "el producto era viable", empezaron a hacer las pruebas de laboratorios "para un tamaño considerable". Nos situamos en mediados de 2019.

Pero dicha "viabilidad" dio un paso de gigantes cuando el simulador de condiciones meteorológicas del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) les vino a decir que el producto cumplía su cometido de descontaminación. Tocaba la prueba de campo. 

Así que conveniaron con el Ayuntamiento de Murcia la cesión del espacio del Jardín de Santa Isabel para poner su innovador pavimento en el parque infantil. El lugar se antojaba idóneo precisamente por la alta contaminación que allí se concentra al tener al lado la Gran Vía, una de las principales arterias de la ciudad. 

"El proyecto consistía en monitorizar el Jardín tres semanas sin cambiar el pavimento inicial". A continuación, cambiaron el pavimento, introdujeron el material suyo y se volvió a monitorizar la actividad fotocatalítica. Los primeros valores de descontaminación rozaban el 20%, explica. Pero llegó la pandemia y el confinamiento, así que tuvieron que suspender las pruebas.  Volvieron en junio de 2020 y comprobaron que los valores que absorbía "eran mayores, del 35%", por lo que la esperaba había merecido la pena. 

Los cálculos determinan que en ese parque de Murcia, los 200 metros cuadrados donde está instalado el producto equivalen a la descontaminación completa de 25 vehículos al año. Pero no es el único, su instalación también ha llegado a otros parques de Murcia, Madrid, Zaragoza, Huelva y próximamente en Novelda o Alzira, entre otros municipios de España.