Alicante

Un dios griego para conectar el pasado, presente y futuro del balonmano alicantino. Eso es lo que pretende el nuevo proyecto deportivo de lo que fue el Sporting Horneo, ahora bajo el nombre de Eón, dios del tiempo y la eternidad, que se inspira en el pasado glorioso de este deporte en la ciudad para lanzar un proyecto ambicioso de presente que garantice un futuro en la élite.

No solo ha mutado el nombre, sino también la imagen corporativa de la entidad, inspirada en algo tan alicantino como los colores rojo y azul del paseo de La Explanada, que también aparecen en su escudo. Y el nuevo lema “ganar en equipo” ya es una declaración evidente del deseo de involucrar a toda la ciudad en la aventura.

El acto de presentación, celebrado en el MARQ, ha contado con la presencia de representa representantes de las administraciones públicas, como Diputación y Ayuntamiento, de otras entidades deportivas, como Fundación Lucentum, Hércules o Intercity, y jugadores y técnicos de la nueva plantilla del Eón Alicante.

El presidente del club, José Sánchez, ha afirmado que el club pretende “devolver al balonmano de la ciudad de Alicante donde merece estar, en lo más alto”, motivo por el que se ha realizado un gran esfuerzo en formar una plantilla competitiva. “Hemos planteado un proyecto deportivamente sólido y ahora necesitamos lo más importante, una afición dispuesta a ganar a nuestro lado”, añadió.

El director general de la entidad, Jaime Cremades, Ñago, ejemplifica mejor que nadie el puente entre el pasado, presente y futuro del balonmano alicantino. Exjugador del Calpisa y Tecnisán en los tiempos gloriosos, Ñago dirige ahora los hilos del equipo, que disputará sus partidos en el mítico Pitíu Rochel, desde los despachos.

 “Queremos que el nuevo Eón Balonmano Alicante ilusione a la afición con fichajes, juego y resultados, formando parte del día a día de nuestra ciudad, volviendo a ser la leyenda que un día fuimos”, indicó. “El balonmano ha dado grandes alegrías a nuestra ciudad. Y creemos que puede volver a hacerlo. Queremos recuperar algo que nos pertenece y que queremos compartir. Algo grande y digno de perdurar”, apostilló.

La entidad, explicó Ñago, ha decidido tomar el nombre de Eón para ser “eterno y recordado” y adelantó que el club presentará en septiembre una nueva fundación que será “importante para la ciudad desde el punto de vista social y deportivo”. “Así, el Eón Balonmano Alicante ganará también en igualdad, diversidad, cultura, compromiso y solidaridad. Un nuevo proyecto que presentaremos al inicio de la temporada”, sentenció.  

El nuevo proyecto nace sin techo. El ascenso a la Asobal es solo el primer paso de un largo viaje que apunta, incluso, a Europa. Eón quiere ser tan eterno como el mismísimo Calpisa. 

Noticias relacionadas