Alicante

Suena la campana y el Hércules enfila la última recta hacia la meta con ligera desventaja sobre los rivales y sensaciones extrañas. Tiene el mejor calendario de todos los implicados, con dos partidos en Alicante y uno fuera ante un rival ya descendido, pero el equipo ha demostrado no ser fiable.

"Si ganamos los tres partidos nos metemos seguro", afirma su entrenador, Lolo Escobar, quien precisa, sin embargo, que no vale solo con clasificarse para la promoción. "Hay que meterse con garantías y con mejores sensaciones", añade.

En opinión de extremeño, que el Hércules haya llegado con vida a tres jornadas del final "arregla una temporada que estaba torcidísima", pero no es suficiente en una plaza tan exigente como Alicante.

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"Hubiéramos firmado estar en esta situación y tener estos los rivales, pero el problema es que aquí esto no vale. Tendríamos que estar mejor, hacer más goles y ser más compactos", señala el técnico, quien califica el partido del domingo como una "una final más" de las muchas que lleva jugando desde su llegada al banquillo.

"Esperemos no fallar", confía el preparador, para el que "la ilusión va siempre de la mano del fracaso". "Cuando ilusionas mucho las miras son altas y el golpe es enorme", razona Escobar, quien señala las derrotas ante los cuatro primeros clasificados como un punto de inflexión negativo para el Hércules. "Nos pesaron y nos condicionaron, sobre todo las cabezas. Estamos remontando el vuelo y espero otro punto de inflexión estas tres semanas.

El entrenador del Hércules se mostró comprensivo con el "hastío" que vive la afición, por lo que no se atrevió a pedir nada. "Entiendo el dolor de la gente y somos culpables directa o indirectamente de que estén así porque formamos parte de estos 10 años de penuria", argumenta el extremeño, quien no se atrevió a calificar como un fracaso quedar fuera de la promoción, aunque sí como una "decepción muy grande".

Perfección

El técnico deseó ante el Alzira un partido similar al de la primera vuelta, en el que el Hércules generó numerosas ocasiones de gol, entre ellos un doble gol fantasma de Jean Paul que no fue concedido por el árbitro. "Nos tenemos que exigir estar perfectos en defensa y en ataque porque con hacer lo justito no nos está llegando", afirma el entrenador, quien desea clasificar al equipo para la fase de ascenso y así relanzar las ilusiones de jugadores y aficionados.

Lolo Escobar admite que no es una buena señal que cada jornada tenga que buscar soluciones tácticas para modificar el juego del Hércules, pero aclara que no se va a quedar "parado o bloqueado". "Si no me siento identificado con lo que veo el domingo seguiré buscando, como hacía mi abuelo con la combinación ganadora de la lotería", bromea.

Descartado Harper en las tres jornadas que restan, el técnico dio luz verde al regreso de Jiménez y asegura que Míchel necesitaba un descanso como el del pasado fin de semana para afrontar con más frescura y mejorar su rendimiento en el tramo final del curso.

Protestas de la afición

El domingo por la tarde, apenas una hora antes del partido, la plataforma Podemos Salvarlo, colectivo muy crítico con la gestión de Enrique Ortiz al frente del club, ha convocado una concentración de aficionados y una posterior marcha hacia el estadio para manifestar su protesta por la deriva institucional de la entidad. La crispación de la hinchada no sorprende a Escobar, quien dice conocer perfectamente antes de su llegada el ambiente de crispación que rodea al club.

"Llegué aquí en una guerra civil. No puedo decir que me sorprende porque sé lo que hay. No tengo que luchar contra ello, solo aceptarlo y enfocarme en lo mío", afirma el extremeño, quien volvió a referirse a la situación que vive Ander Vitoria, la gran apuesta ofensiva del club para esta temporada que, sin embargo, sigue sin contar para el técnico.

"Yo no quiero perder ni empatar. Si supiera que puede ser el Ander Vitoria del año pasado y ser un jugador que no dé… Le he puesto cuatro partidos y tenemos el mismo problema, el del gol", argumenta el entrenador. "Si sé que mete un triplete sale al campo con el brazalete y tira los penaltis, las faltas y los córneres. Los delanteros son rachas y hoy ninguno nos da garantías. Sigo buscando ese jugador nos meta en el playoff", concluye.

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