Oleguer Pujol Ferrusola (i), hijo del expresidente catalán Jordi Pujol.

Oleguer Pujol Ferrusola (i), hijo del expresidente catalán Jordi Pujol. TONI GARRIGA EFE

España CORRUPCIÓN

Manual de blanqueo de Oleguer Pujol

El hijo del expresident propuso utilizar Marway para ocultar las comisiones a Hacienda, aunque sus socios se negaron a utilizar una sociedad 'manchada' para evadir el dinero por los edificios de Prisa.

14 marzo, 2016 03:15

El hijo menor del ex presidente catalán, Oleguer Pujol Ferrusola, guardaba en su domicilio anotaciones manuscritas con los mecanismos que empleaba para eludir sus responsabilidades tributarias. En varios de esos documentos, a los que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, queda reflejado cómo el pequeño del 'clan Pujol' tenía varias opciones para no declarar a Hacienda los beneficios obtenidos por la venta de varios edificios del Grupo Prisa, a través de Drago Capital.

“La opción de que Marway le cobre a D.C. Está muy visto. Mucho riesgo”; “Pasar el O.M.A entero a Marway es demasiado evidente en esta fase”. Estas anotaciones realizadas por Oleguer Pujol son opiniones recogidas por su asesor fiscal, a quien consultó para estudiar la forma de articular el acuerdo estratégico en el que se iban a recoger las cantidades a percibir por Pujol y su socio tras la venta de los edificios. En 2008, la sociedad Longshore compró los inmuebles del Grupo Prisa. Se ejecutó la inversión a través de Drago Capital, que le alquila al vendedor los inmuebles.

De otros informes policiales que constan en la causa seguida por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, el O.M.A es el contrato a través de cual se hizo la compra de los inmuebles de Prisa.

En este documento se puede ver como Oleguer Pujol quería utilizar la sociedad Marway para cobrar las comisiones. La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía (UDEF), que lleva a cabo la investigación dirigida por la Fiscalía Anticorrupción y el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, analizó esta documentación y concluyo que “se puede ver que, tras plantearse la utilización de la sociedad Marway B.V., decide consultar con un tal Pablo” y es tras recibir la opinión de este cuando se decide “descartar la utilización de esta sociedad para conseguir evitar el pago de impuestos por los servicios prestados y relacionados con Longshore S.L”.

Precisamente, este informe fue la base para que el magistrado acordara una comisión rogatoria a Holanda para registrar el Grupo ITPS y obtener datos de dos de sus sociedades, Marway y Ard Choille.

La Policía señala que “parece claro” que el riesgo del que habla el asesor fiscal y que recoge Pujol en sus anotaciones “se refiere a la posibilidad de que la operación sea detectada por la Hacienda Púbica y, por lo tanto, para evitar esta detección se recomienda que no sea utilizada esta estrategia nuevamente”.

Los edificios de Prisa se vendieron por 370 millones de euros y según se desprende del informe policial, Pujol tenía planteado tres opciones, “que tienen en común que, de llevarse a cabo, la recepción de los pagos sería opaca para la Hacienda Pública”.

Las opciones son:

1: “Opción de que 100% cobro a DC y este pagar factura a una entidad en un paraíso, el pago no es deducible".

2. “Opción todo x fuera. () Pablo + Iván”.

3. “Opción de que con cada capital call; DC renuncie al 50% de los fees a favor de la Coop y RBS aporte (..) x el 50% suyo”.

Cuando se refiere a “Coop” la Policía señala que se refiere a la sociedad Drago Mediterranean, mientras que RBS es el Royal Bank of Scotland, que en 2008 contaba con el 50% de la sociedad Longshore.

Las estrategias contempladas por Pujol para evitar tener que declarar la fisco español los beneficios de esas operaciones no eran bien vistas por el fondo Cerberus, uno de los inversores de Drago Capital, y en el que años más tarde entraría a trabajar uno de los hijos del expresidente del Gobierno, José María Aznar.

En esta anotación, fechada entre finales de octubre y principios de noviembre de 2010, queda recogida la preocupación de Cerberus por la forma en la que se canalizaban los cobros por los servicios de gestión que prestaba Pujol y su socio. En la misma se recogen las reticencias por la forma en la que se van a articular los servicios de gestión, llegando a anotar que “Cerberus no quiere 'colaborar' de ninguna forma en un posible fraude fiscal”.

La sociedad que Oleguer Pujol quería utilizar para desviar el dinero, Marway, fue la utilizada para canalizar parte del beneficio obtenido por la venta de las sucursales del Banco Santander. En aquella operación, Pujol y su socio cobraron 11,5 millones de euros de comisión, que fue canalizada a través de las sociedades holandesas Ard Choille y Marway B.V. De esa comisión hubo 1,5 millones de euros que no fueron canalizados a través de estas dos sociedades interpuestas sino un “medio alternativo, desconociéndose a día de la fecha, cual pudo haber sido éste, así como el destinatario final de este pago”, tal y como consta en un informe policial fechado en septiembre.

Esta anotación está fechada en noviembre de 2008 y recoge la distribución de la comisión a través de Marway y Ard Choille, apareciendo los 1,5 millones de euros, que eran incluidos en el global de la comisión, de forma separada e independiente (en la parte inferior izquierda del documento).

Estas dos sociedades holandesas pertenecen al Grupo ITPS, registrada en Amsterdam hace unos meses por la Policía y la Fiscalía Anticorrupción, que se desplazaron hasta allí para incautar una serie de documentación. Según el informe policial a través del cual los investigadores solicitaron a Pedraz que acordara una comisión rogatoria a Holanda, “la vinculación del Grupo ITPS con las actividades de ocultación de los ingresos que recibieron tanto Oleguer Pujol como Luis Iglesias, entre otros, “ha sido constante a lo largo de los años”.

Además, este grupo ha esta vinculado a otras actividades delictivas. En el 'caso Pretoria' se señala que la sociedad Ard Choille ya fue utilizada, al menos entre los años 2003 a 2005, por los principales implicados en esta trama de corrupción para canalizar las ganancias obtenidas, al aparecer ilícitamente, en las operaciones 'Payeresa' y 'Niesma'.

“La opacidad de las sociedades vinculadas al Grupo ITPS son evidentes quedando especialmente de manifiesto en el caso de Marway B.V. A través del protocolo notarial de manifestación de titularidad real de esta sociedad”, en el que se manifiesta que el único titular real es BMD Management BV, cuyos titulares reales son sociedades de Jacob Broers y John Willekes MacDonalds, socios del Grupo ITPS.