Más ingresos, pero menos empleo. Ese es el resumen del año 2016 para la filial española de Twitter. El ejercicio se cerró con 5,3 millones de euros de ventas, un 10% más, y con un recorte significativo de una plantilla. La red social mantiene su estructura fiscal: Twitter Spain cobra comisiones por servicios de marketing a la matriz irlandesa (Twitter International Company) que es quien registra todas las ventas por publicidad y acuerdos comerciales en el país.

La empresa salió a escena en octubre de 2016 para presentar los resultados del tercer trimestre del año. Ante la necesidad de reducir costes, anunció un recorte de personal del 9% con el objetivo de acelerar la llegada a los números negros (equilibrio financiero entre ingresos y gastos).

En España, ese ejercicio se cerró con un total de 18 empleados, entre los fijos y los no fijos, según la cuenta de resultados recién presentada en el Registro Mercantil español y consultada por EL ESPAÑOL. Contrasta con los 24 trabajadores con los que contaba a 31 de diciembre de 2015.

Evolución de la plantilla. EE

El número medio, según la memoria anual, de empleados en la plantilla fue de 16 durante ese año 2016. Se redujo principalmente la cifra de ‘managers’ de la filial (de 9 a 3).

Consultada sobre el balance anual, la compañía descarta hacer ningún comentario a este medio.

Más ingresos

Más allá de la plantilla, el negocio ha crecido en torno al 10% alcanzando los 5,3 millones de euros, frente a los 4,8 millones de un año antes. Con todos los gastos, los beneficios antes de impuestos han sido de 402.000 euros y, por tanto, la filial ha pagado un Impuesto de Sociedades de 112.000 euros.

Evolución del negocio. EE

Estos ingresos nada tienen que ver con la venta de publicidad de manera directa, que se lleva a cabo desde la matriz irlandesa. Twitter Spain, fundada en febrero de 2013, le factura la totalidad de su volumen de negocio a Twitter International Company, con sede en Dublín.

Esta es la estructura fiscal que tienen compañías como Google, Facebook o la propia Apple. En el caso de Twitter no ha habido inspecciones específicas de la Agencia Tributaria, pese a que tiene abiertos a inspección los cuatro últimos ejercicios para todos los impuestos que corresponden.

Entre los gastos reconocidos por la filial española se encuentra el alquiler de la sede con la que cuenta en el Paseo de la Castellana de Madrid. En total, durante el ejercicio pasado pagó 319.000 euros por el arrendamiento.

Sin consejero delegado en España

La sociedad sigue aún sin 'capitán'. El pasado mes de junio, Pepe López de Ayala, quien ha ejercido como máximo directivo en España desde 2013, anunciaba su marcha para ejercer como cabeza visible para los mercados de habla hispana de Latinoamérica.

Hasta ahora no se ha encontrado reemplazo para este puesto. Esperan que se logre en las próximas semanas.