En plena guerra contra Car2Go, Emov ha decidido incrementar sus tarifas 5 céntimos. Lo hace por primera vez desde su aterrizaje a finales del año pasado en la capital madrileña. Su responsable en España, Fernando Izquierda, admitía a EL ESPAÑOL el pasado mes que los precios con los que arrancó "comprometen la rentabilidad". Como contraprestación ha incrementa de la zona de actuación: sus coches se podrán usar en Sanchinarro, Las Tablas, Ventas y Pueblo Nuevo. Y además ha sumado medio centenar de coches más a su flota.

"Los precios en el resto de las ciudades europeas oscilan entre 24 y 29 céntimos; el precio es muy bajo y, a estos niveles, claro que compromete la rentabilidad”, admitía Izquierdo. Ahora ejecuta una subida que sigue a la que ya llevó a cabo su competidor el pasado mes de marzo.

El servicio, que arrancó de manera oficial a mediados de diciembre, hoy cuenta con 110.000 usuarios en la capital madrileña. Estos usuarios deberán pagar 24 céntimos por cada minuto de uso de uno de esos vehículos. Anteriormente, el precio era de 19 céntimos.

La compañía ha insistido en que este incremento responde a una "normalización" del precio y que el coste sigue siendo "muy competitivo". Como contraprestación: aumentan el radio de acción a otros cuatro barrios de Madrid y además suma 50 vehículos más a su flota, que suma 550.

Una dura batalla economica

Tanto Emov como Car2Go han reconocido que la rentabilidad de su servicio sigue sin haberse logrado a los precios actuales. “No creo que haya muchos servicios de este tipo rentables en otros mercados; es un negocio que hoy por hoy es tremendamente complejo y por el que todas las empresas que apuestan lo hacen mirando al futuro”, explicaba a este medio el responsable de Emov.

En los dos casos, la duración de los viajes está comprendida entre los 20 y 25 minutos. Es decir, el ingreso medio por cada uno de los servicios para las compañías (a tarifas entre 19 y 21 céntimos por minuto) es de un mínimo de 3,5 y un máximo de 5 euros.

En el otro lado están los costes. Algunos inherentes a contar con una flota de medio millar de coches: mantenimiento y recarga de las baterías de sus motores. Y otros vinculados al coche, como es el caso del seguro