La capital zamorana es un lugar espléndido en lo referente al arte románico, y es que se ha llegado a considerar a Zamora como la capital del románico por ser la ciudad que más monumentos de este estilo, y en buen estado de conservación, posee de toda Europa. Además de la catedral, en su casco histórico se conservan más de veinte iglesias y otros edificios civiles y militares de este estilo arquitectónico, como las murallas, el castillo, el puente sobre el río Duero o las casas señoriales.

La Catedral de Zamora es el emblema de esta ruta zamorana. Se levanta sobre el punto más alto de la ciudad y es el monumento más representativo del arte románico zamorano. Data del siglo XII y, sobre todo, sorprende su cúpula, con decoración exterior de escamas, además de la Puerta del Obispo, en la fachada sur, que constituye otra de las muestras más bellas del estilo.

El segundo templo religioso más importante, tanto por su tamaño como su representatividad, es la Iglesia de San Pedro y San Ildefonso, declarada como Monumento Nacional. Iniciada en el siglo XII y renovada durante el XV, fue levantada sobre una iglesia visigoda y es el lugar donde se encuentran los restos de San Ildefonso, primer obispo de Zamora.

Se dice que el templo religioso más bello y elegante de Zamora es la Iglesia de Santa María Magdalena, también declarado Monumento Nacional. Sorprende por estar construida en una única nave reforzada por contrafuertes y contar con una torre inconclusa a los pies y un ábside semicircular para albergar la capilla mayor.

Aunque quedan varias iglesias más que recorrer en la capital zamorana, como la de Santa María la Nueva o la de Santiago El Burgo, merece un reconocimiento especial la Iglesia de los Caballeros, ya que, según cuenta la leyenda, fue en ella donde fue nombrado caballero el Cid Campeador por el rey Fernando I de Castilla.

Cambiando de tercio, en Zamora se ofrecen más muestras del estilo románico más allá de sus iglesias y templos religiosos. La zona estratégica en la que se levantó la ciudad, a orillas del Duero y en plena Vía de La Plata, hizo necesaria la construcción de una muralla para defender la ciudad.

Las murallas defensivas se levantaron entre los siglos XI y XIII y llegó a tener tres, de ahí la distinción de “Zamora, la bien cerrada”. Hoy en día se conservan unos tres kilómetros de esta obra, en la que se pueden contemplar varias puertas, como la Puerta de Doña Urraca, la Puerta de Santa Colomba o el Portillo de la Traición.

El castillo es otro de los monumentos estrella de Zamora, construido a mediados del siglo XI en la parte más alta de la ciudad. Está flanqueado por un foso de gran profundidad y tiene una planta romboidal sobre la que destacan tres torres, además de la Torre del Homenaje, la más alta. Hoy en día, en su interior se encuentra el Museo Baltasar Lobo y desde el parque anexo se ofrecen unas vistas fabulosas del entorno, con el río Duero y el conjunto histórico de Zamora como telón de fondo.

Entre los puentes que cruzan el río Duero en la ciudad, destaca el Puente de Piedra o Puente Nuevo, construido en el siglo XII bajo el estilo románico. Consta de dieciséis arcos apuntalados y una longitud de 250 metros, y su nombre se lo debe a que fue el levantado para sustituir al destruido puente romano.

Aunque en Zamora capital existen más representantes del estilo románico y pasear por su entramado de calles es una de las actividades fundamentales para descubrirlos, en la provincia existen otros exponentes de este tipo de arquitectura. Por ejemplo, Benavente es otra ciudad importante en lo referente al románico y donde resaltan las construcciones de la Iglesia de Santa María del Azogue, la de San Juan del Mercado y la del Monasterio de Moreruela, entre otras.

Por otra parte, imprescindible resulta la visita a Puebla de Sanabria, un precioso pueblo para visitar en un fin de semana, destaca la Iglesia de Santa María del Azogue, situada en lo más alto del caserío que sorprende por su mezcla de estilos por las diferentes modificaciones que sufrió. Su principal elemento románico es su hastial occidental. Este pueblo también es una buena opción para acercarse al Lago de Sanabria, el lago de origen glaciar más grande la península Ibérica.

Más información en: infoviajes.contacto@gmail.com