En días de calor intenso, las playas fluviales se convierten en un refugio ideal para escapar de las altas temperaturas. Estos espacios reúnen todo lo necesario para disfrutar de un día de verano en familia, en pareja o con amigos.
Aunque Galicia destaca por sus miles de kilómetros de costa, con grandes y pequeños arenales paradisíacos, el interior de la región esconde un gran número de rincones donde darse un refrescante chapuzón: desde pozas hasta piscinas naturales o arenales fluviales.
"Un lugar animado con aguas perfectas"
La playa fluvial de A Cova, en Saviñao (Lugo), encabeza muchos de los rankings sobre playas fluviales en Galicia. De hecho, la revista Viajar la ha nombrado la mejor playa fluvial de la región. Comparte categoría con otras destacadas playas gallegas, como Rodas y Mar de Fora.
Situado en pleno corazón de la Ribera Sacra, este espacio de baño se encuentra a pocos kilómetros de la frontera con la provincia de Ourense. Por esta razón, la revista Viajar lo ha clasificado como parte de dicha provincia.
La playa de A Cova es una de las zonas de baño de interior más populares de Galicia. El arenal aprovecha una curva del río Miño para crear un lugar tranquilo e ideal para disfrutar con los más pequeños de la casa.
Playa fluvial de A Cova
"Aquí, además de unas aguas perfectas (aunque un poquito frescas) te encontrarás rodeado de un paisaje natural en el que predominan los viñedos", apunta la revista Viajar, que agrega lo siguiente:
"En esta playa fluvial también puedes hacer deportes de todo tipo: paddle surf, kayak, pedaletas o, simplemente, pasear por los senderos del entorno. O, si eres más disfrutón, puedes acercarte al restaurante que se encuentra a los pies de la misma playa".
Las instalaciones del restaurante Playa de A Cova ocupan un edificio de piedra con la playa a sus pies y unas vistas privilegiadas del Miño. La oferta gastronómica se centra en los productos de la zona y la cocina tradicional, pero con un toque actual.
Restaurante Playa de A Cova
A medio camino entre los embalses de Belesar y Os Peares, este rincón de la geografía gallega es un lugar perfecto para la práctica de deportes acuáticos. Existen distintas opciones para refrescar los calurosos veranos de la Ribeira Sacra: desde rutas en kayak hasta visitas a la catarata Augacaída.
En este sentido, la cascada de Augacaída tiene un alto de unos 40 metros de altura que se encuentra muy cerca de la desembocadura en el río Miño. El acceso se puede realizar a través de una ruta de senderismo o en zodiac con las rutas fluviales de Turismo Pantón y Quinta Sacra.
La playa de A Cova es, sin duda, una visita ineludible a orillas del río Miño. El paisaje es impresionante no solo en verano, sino en todas las estaciones del año, con vistas excepcionales del meandro O Cabo do Mundo, una de las imágenes más hermosas de la geografía gallega.
Desde Vigo hasta la playa de A Cova hay aproximadamente 133 kilómetros por carretera. La forma más cómoda y rápida de llegar es tomar la autovía A-52 y seguirla hasta incorporarnos en Ourense a la carretera N-120 siguiendo las indicaciones hasta la playa de A Cova.
Las coordenadas GPS son: 42.5648712,-7.6843248,857.