Los sindicatos UGT, CIG y CC.OO. se han posicionado este viernes en contra de la sentencia de la Audiencia de Pontevedra de julio pasado contra una extrabajadora de Vitrasa, Patricia F.N., a la que condenó a 15 años de prisión como coautora de los incendios de dos autobuses.
Los sindicatos han criticado que se trata de una sentencia "ejemplarizante" con la que se quiere mandar un mensaje de aviso al movimiento sindical y consideran que se trata de una pena desmedida. La pareja de la extrabajadora también fue condenado, en este caso a 22 años de cárcel.
Así lo han trasladado en rueda de prensa los secretarios comarcales de las centrales. El responsable de UGT-Vigo, Ernesto Fontanes, ha advertido de que Patricia, que era delegada de este sindicato en la concesionaria, fue condenada simplemente por ser pareja del autor material de los incendios, sin pruebas concluyentes en su contra. "Un fallo así no se le aplica ni a los terroristas, es una barbaridad", ha lamentado.
Para Fontanes, da la impresión de que "manda un mensaje al movimiento sindical: 'quietos ahí, quietos todos'". "La sentencia no hay por donde cogerla (...) queremos que se le de la vuelta en el TSXG", ha explicado sobre el fallo, que está recurrido en apelación ante el alto tribunal gallego.
La secretaria comarcal de CC.OO., Montse Carrera, ha recordado que el incidente se produjo en un contexto de conflicto laboral en Vitrasa, en vísperas de 1 de mayo de 2023, y que la trabajadora tenía la "doble mochila" de tener que llevar a cabo su tarea como conductora y su responsabilidad como representante de los trabajadores.
Carrera ha insistido en la desproporcionada pena, que siempre cae sobre el trabajador: "Hemos vivido accidentes laborales mortales y no vimos estas sentencias (...), nos vienen a decir 'quietecitos, como os mováis vamos por aquí'". Además, ha criticado que la Audiencia considerase prueba de cargo la actuación de Patricia, que no intentó extinguir el fuego. "No todo el mundo actúa igual en una situación límite", ha incidido.
"Justicia de embudo"
Por su parte, Alberte Gonçalves, secretario comarcal de la CIG, ha insistido en que la sentencia pretende ser "ejemplarizante y disciplinadora", en una "estrategia deliberada para criminalizar el movimiento sindical", y ha calificado la resolución de "tremendamente injusta" por la "ausencia de pruebas".
El líder de la CIG en Vigo ha remarcado que cree en la inocencia de la extrabajadora y ha recordado que los incidentes se produjeron en el marco de una huelga, en una "escalada de tensión" provocada por la "intransigencia de Vitrasa", con la "complicidad" del Concello.
En todo caso, ha denunciado que se haya aplicado la "justicia del embudo", la que pone su parte ancha al servicio "de los de siempre". Así, ha recordado los numerosos casos de abusos empresariales y los perjuicios que ocasionan a los trabajadores, sin que "nunca" se haya visto una condena, y menos de este calado. "Despidos masivos, contratos precarios, esto sí que arruina vidas, y no se castiga con la misma contundencia", ha subrayado.
