La organización sindical CUT ha alertado de que la producción de las furgonetas K-9 de Stellantis en Turquía podría tener un "impacto" en la fábrica de Vigo. La actividad del país de la media luna influirá tanto en la versión eléctrica del vehículo como en la térmica.
En un comunicado recogido por Europa Press, el sindicato ha subrayado que el ensamblaje en "exclusiva para todos los mercados mundiales" de este vehículo —que incluye modelos como el Citroën Berlingo o el Peugeot Rifter— fue un "compromiso explícito y vinculante" en la solicitud de ayudas concedidas por la Xunta de Galicia a la compañía.
"Los hechos recientes, confirmados por fuentes de diversos medios de comunicación, revelan un desvío sistemático de la producción a plantas externas, incluyendo ahora Tofas en Turquía, que quiere este compromiso y que puede generar un impacto en el centro de Vigo", ha subrayado el secretario de la sección sindical de la CUT en Stellantis, Vítor Manuel Mariño.
El sindicalista considera que esta exclusividad "no era opcional", era "la base" para la aprobación de la ayuda. También ha subrayado que el Gobierno gallego otorgó ayudas por 81 millones de euros a Stellantis en 10 años, que se suman a los fondos del PERTE VEC.
"Desde la CUT exigimos responsabilidad a la dirección de Stellantis y a las administraciones públicas para con los trabajadores, motor principal del sector en la comarca. También corresponde a la clase política exigir esa responsabilidad", ha añadido Mariño.
El líder de la CUT también ha señalado que esta "posible deslocalización" podría suponer un "incumplimiento" de la nueva ley de la industria y autonomía estratégica de Galicia.
