El precio del alquiler continúa su senda alcista en Vigo. Este septiembre ha registrado un incremento del 8,1% respecto a hace un año, aunque se mantiene por debajo de la cifra récord alcanzada en junio de 2025.
Así lo detalla el último informe del portal inmobiliario Idealista, que sitúa el precio por metro cuadrado en la ciudad olívica en los 10,7 euros —tan sólo 20 céntimos por detrás de los valores de principio de verano—.
Ahora bien, en comparación con el mes de agosto, los alquileres en Vigo tan sólo se han incrementado en un 1%. Cabe destacar que los precios de arrendamiento en la ciudad olívica descendieron un 1,3% mensual y un 1,8% trimestral durante el último mes del verano, antes de la Vuelta al Cole.
El encarecimiento de la vivienda es notable en el centro urbano, donde se han alcanzado también los 10,7 euros por metro cuadrado. Idealista también ofrece los precios del barrio de Teis, que ya superan la media de la ciudad, tras registrar los 11,6 euros por metro cuadrado.
Pontevedra, la provincia más cara para alquilar
La situación de Vigo no es ajena a la de su entorno. Los vecinos de la provincia de Pontevedra también han sufrido un incremento en el precio del alquiler en el último año, en este caso del 7,2% en septiembre, y los arrendamientos más caros de toda Galicia.
Así, la provincia alcanza un precio de 10,3 euros por metro cuadrado, que sí se sitúa por debajo de los valores de agosto (-3,1%) y de hace tres meses (-3,9%). Esto se debe principalmente a la bajada de los alquileres en los concellos de Baiona, Nigrán y O Grove tras el verano.
La capital de provincia, Pontevedra, se sitúa en su máximo histórico en septiembre. El alquiler por metro cuadrado en la Boa Vila cuesta 8,8 euros, lo que supone una subida del 5,3% respecto a hace un año, así como ligeros ascensos en sus tasas mensual (+0,3%) y trimestral (+0,7%).
Ni Vigo ni Pontevedra son los municipios más caros de la provincia. Este galardón se lo llevan los concellos de Sanxenxo (18,9 euros/m2) y O Grove (20,1 euros/m2), donde el turismo es más agresivo que en ninguna otra parte de las Rías Baixas.
