Un complicado y aparatoso incendio se ha declarado en una granja avícola de Redován (Alicante). Este provocó, la noche del pasado sábado, la muerte de entre 20.000 y 25.000 gallinas que se encontraban en el interior de la nave. Otras 30.000 aves se libraron de las feroces llamas al encontrarse en otra nave de la granja. Su propietario ha estimado que las pérdidas económicas ascienden a 420.000€.
Aunque por el momento se desconocen las causas del fatal incendio, el propietario de la granja explicó a la Guardia Civil que le saltó la alarma en la granja e inicialmente se pudo ver que salía humo de unos extractores. Por ello, una de las hipótesis que se barajan es que el siniestro tuviera un origen eléctrico.
El Consorcio Provincial de Bomberos fue alertado del incendio poco antes las once de la noche y las tareas de extinción se alargaron hasta las dos de la madrugada. Durante tres horas, hasta 25 efectivos de los parques de Orihuela, Torrevieja, Almoradí, Elche y Crevillent se tuvieron que emplear a fondo para lograr controlar el fuego.
Fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante indicaron que al ser domingo no había trabajadores en la granja. Sin embargo, las que no tuvieron escapatoria del fuego fueron las 20.000 aves que estaban dentro de la nave donde se declaró el incendio. Además de las aves que murieron calcinadas, muchas perecieron al derrumbarse sobre ellas el techo de la nave.