Los yogures son unos lácteos imprescindibles en la dieta diaria de todos los consumidores españoles: es una fuente de vitaminas y minerales. Además, es uno de nuestros postres favoritos. Sin embargo, si no se conservan correctamente en la nevera o están caducados pueden ocasionar varios problemas de salud. Por eso, debemos conocer cuánto tiempo pueden estar fuera del refrigerador para consumirlos con las mejores garantías. Lo mismo pasa con otros alimentos como las verduras o el pescado que siempre deben mantenerse en ambientes fríos.
Si nos pasamos el día fuera de casa por trabajo y no nos da tiempo a meter los yogures en la nevera, muchos consumidores se preguntan si esto podría ser un problema a la hora de consumirlos porque, ¿cuánto tiempo puede aguantar este alimento sin refrigerar para que no se estropee y suponga un peligro para nuestra salud? Pues bien, depende del ambiente, del tiempo que esté fuera y de la propia temperatura a la que se encuentra el yogur.
Es decir, si el yogur está cerrado porque lo acabamos de comprar y se mantiene a más de 5 grados durante dos horas, posiblemente cambie su textura y sabor porque aumenta su cantidad de suero. Sin embargo, esto no suele suponer un problema para la salud pero, sí notarás un cambio en sus propiedades: se puede comer, pero igual te sabe diferente.
Yogur fuera de la nevera.
No obstante, los expertos avisan: lo ideal es que un yogur esté siempre en refrigeración porque, si en el proceso térmico en el que se ha tratado la leche con la que se elabora el yogur, ha quedado algún microorganismo, se podría reproducir a temperatura ambiente.
Obviamente, si el yogur está fuera a una temperatura de 30 grados se debería tirar inmediatamente porque podrían cambiar notablemente todas sus propiedades y, por tanto, ocasionarnos problemas de salud.
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