Ser Miss no es, ni mucho menos, tarea fácil. Son muchos paseos con tacones arriba y abajo, cambios de modelito y preguntas del jurado. Pilar Magro, representante de Cáceres, se convirtió en la gran protagonista de la selección de la representante española para el concurso de Miss Universo. ¿Ganó? No, esa fortuna recayó en la albaceteña Sofia del Prado. Lo que le ha propulsado a la fama viral ha sido caerse a la piscina.

Fue en uno de los desfiles ante el jurado. La modelo se acercó demasiado al borde de la piscina y trató de encandilar a los jueces con un giro sobre si misma. sin embargo perdió pie y al terminar el tirabuzón el pie de apoyo estaba sobre la piscina. Como caminar sobre el agua es complicado salvo si eres Jesucristo, la muchacha fue víctima de la gravedad.

La modelo se ha tomado la situación con humor, y ha cambiado su perfil de Instagram donde ahora se puede leer "no me he caído, me he tirado" junto a dos emojis nadando.

Los tacones los carga el diablo, y son muchas las modelos quienes han sido víctimas de tal trampa mortal sobre la pasarela. Algunas han demostrado tener unos tobillos de goma, permitiendo torsiones que a otros seres humanos les habrían causado cinco esguinces-, mientras que otras tratan de llevar con la mayor dignidad posible sus visitas al suelo.

Pero no solo los tacones son el enemigo de las candidatas a misses. También lo pueden pasar fatal en el momento que tienen que contestar a las preguntas del jurado y del público.

Y, por supuesto, un superclásico: