"A cada cerdo le llega su San Martín", es uno de los refranes más populares de nuestro país y tal vez de los que más se pueda exportar. Por ejemplo, en Francia existe el mismo dicho palabra por palabra. Pero no me quiero ir por los cerros de Úbeda, iniciaba el artículo con un refrán por la siguiente noticia: el pub donde Marx y Engels discutían sobre el capitalismo y la organización obrera ha cerrado.

Ya ha pasado tiempo desde que "El Dragón Rojo", como así se le conocía, pasó a llamarse "The Crescent" pero es que ahora ni tan sólo este último ha aguantado el paso inexorable del tiempo. El barrio donde está sito el local, en Manchester, se está convirtiendo en una zona popular y es más que probable que acabe siendo convertido en un Starbucks, eso sí con baristas con barba. Ay, ¡qué ironía!

Varios periódicos británicos han intentado ponerse en contacto con los dueños del local pero no han obtenido respuesta. Todo parece indicar que han echado el cierre definitivo y que no volveremos a saber nada más de un local donde se hizo historia.

En cierto modo es una pena que este local desaparezca. Como también es una pena que los cines de nuestras ciudades acaben convirtiéndose en tiendas de ropa o que los colmados vaya desapareciendo para que en su lugar se instalen hamburgueserías veganas. Pero supongo que este es el precio del capitalismo.