"Ante la muerte se acaban los chistes" - declaraba Andreu Buenafuente al dar el pésame por la muerte de Rita Barberá en el monólogo inicial de su programa Late Motiv del pasado 23 de noviembre. En dicho pésame, sin embargo, quedaba claro que el cómico no tenía previsto dar tregua a la crítica y el sarcasmo pese al repentino fallecimiento de la exalcaldesa de Valencia por infarto en un hotel de Madrid: "Hoy es un día de respeto. El respeto que ella muchas veces no demostró, sobre todo con las víctimas, en Valencia".

Pues bien, el propósito de dar carpetazo a los chistes con la muerte ha durado un escaso mes y medio. El programa del lunes ha realizado su particular homenaje a los fallecidos durante el 2016, un año abundante en muertes de personajes célebres. Los ha habido de todos tipo en las últimas semanas. La pérdida de estrellas ha sido saludada con emotivos homenajes, la de figuras políticas como Fidel Castro, con controversia. El vídeo de United Unknown, productora especializada en montajes virales y 'guerrilla visual', abandona toda pretensión de corrección política.

Así, su In Memoriam es una parodia del videoclip Thriller de Michael Jackson en el que los fallecidos son transformados en zombis putrefactos. También cuelan a algún "muerto viviente": por ahí asoma la cabeza el depuesto secretario general del PSOE Pedro Sánchez. Es Castro quien acapara el protagonismo: con la mirada desencajada que lucía Jackson en el vídeo original, dirige la coreografía a la que se suman David Bowie, Lemmy Kilmister, Leonard Cohen, Chus Lampreave, Carrie Fisher, Prince, George Michael, Gene Wilder o Alan Rickman.

Si representar como cadáveres a un elenco de personalidades tan queridas que, en algunos casos, han fallecido de forma muy reciente, bordea el buen gusto, la aparición de Rita Barberá es directamente insultante. Su "zombi" no se une al baile, sino que, tras apartar la lápida de su tumba, brinda hacia el espectador con la copa que lleva en la mano y una sonrisa desencajada.

Metedura de pata en 'El Hormiguero'

No es la única falta de tacto a la hora de abordar la muerte de la exalcaldesa de Valencia que se han podido encontrar los espectadores en las últimas semanas. El programa El Hormiguero que conduce Pablo Motos se tomó un parón navideño que suplieron, como es tradicional, con reposiciones de programas ya emitidos.

El que se emitió el 27 de diciembre, sin embargo, era previo a la muerte de Rita Barberá y contenía varios chistes sobre su imputación en la causa por la financiación irregular del PP de Valencia. Para los telespectadores pillados fuera de contexto, resultó chocante.

 

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