Ayer llegaba, por fin, Disney+ a Europa. Después de meses en los que desde EEUU nos ponían los dientes largos, la plataforma ha desembarcado en nuestro país. Lo ha hecho a lo grande, con todo su catálogo de clásicos Disney, películas de Marvel, Pixar, la saga Star Wars y nuevas series como The Mandalorian. Un éxito que se pudo comprobar en las redes sociales, donde todo el mundo compartía capturas de su nueva adquisición y de los iconos que habían elegido para ilustrar su perfil.

En el inmenso archivo de películas también hay varios clásicos inolvidables, y uno de ellos ha llamado la atención desde la salida de Disney+. Se trata de 1,2,3… Splash, la comedia dirigida por Ron Howard y protagonizada por Tom Hanks y Daryl Hannah que cuenta la historia de una sirena que sale del agua y se enamora del protagonista. Un filme que llevó a ambos artistas al estrellato y que ahora vuelve a la ‘fama’ porque Disney ha decidido censurar una escena mítica del filme.

En Splash, cuando la sirena sale del agua había un plano que mostraba toda su figura enfocada desde atrás, mostrando el culo desnudo de Daryl Hannah. La sorpresa llegó cuando al ver la película en la plataforma esa escena había sido reencuadrada cortando por encima de su trasero (como muestra la fotografía de esta noticia) y evitando que se enseñara más de lo debido. La propia película advierte al comienzo de que ha sido “editada”. Y es en esa escena donde muestra ese retoque digital que muchos han considerado censura moralista.

Muchos usuarios han apuntado que lo que ha hecho Disney es incluir la versión retocada que se hizo para emitir sin problemas en las televisiones en abierto de EEUU, pero podrían haber elegido la original. La polémica llega, además, porque no es la primera vez que la plataforma tiene problemas por ser demasiado conservadora. Uno de los proyectos que anunciaron fue la serie basada en la película Con amor, Simón, filme de culto adolescente con protagonista homosexual. Finalmente lo cancelaron y todos los rumores apuntaban que fue porque la temática LGTB no casaba con la imagen familiar de la plataforma.

No había sido la primera víctima. Cuando se anunció esta cancelación, la actriz que da vida a Lizzie McGuire, personaje mítico de Disney Channel, publicó un misterioso post en Instagram que rezaba: “Me suena familiar”. Daba así la clave de la cancelación del remake de la serie, que fue anunciado a bombo y platillo en la presentación de la plataforma y que luego se canceló por diferencias creativas. Fue el creador de la serie, Terri Minsky, el que lo confirmó de forma implícita en una entrevista con Variety asegurando que la serie tenía una visión más adulta del personaje, ya que este tenía ya 30 años, pero que Disney+ querían algo más familiar en la línea de la original.