La película Gente que viene y bah llega a los cines el próximo viernes 18 de enero. Como no podía ser de otra forma, anoche tuvo lugar una premiere por todo lo alto, en la que los protagonistas posaron con unos looks espectaculares a los medios.

Dani Rovira fue uno de los actores que no quiso perderse el estreno. Recientemente salieron a la luz las imágenes del aparatoso atropello que sufrió hace dos años junto a sus compañeros de ruta durante el rodaje del documental Todos los caminos y Dani ha aprovechado el photocall del film para relatar como fue esa desagradable experiencia.

CHANCE: Noche de cine, no podías faltar.

Dani Rovira: No, claro que no. No podíamos faltar. Estamos aquí para apoyar a muerte esta peli, que además tengo unas ganas de verla... He escuchado tantas cosas del rodaje y no solo por Clara, tengo muchos amigos en esta película.

CH: Todo el mundo ha dicho que había muy buen ambiente en el rodaje. Así da gusto.

D.R: Sí, así da gusto. La tónica general en un rodaje suele ser armonía porque todos remamos hacia el mismo camino, que es que la peli salga adelante. Clara me dijo que le dio mucha pena acabar y que los madrugones de esta peli eran menos madrugones para ella.

CH: Qué relajado vas a ver este año los Goya.

D.R: No te imaginas lo relajadito que lo voy a ver. Independientemente de eso estoy convencido de que será una gala maravillosa. Me alegra mucho de que sea en Sevilla, además Andreu Buenafuente y Silvia Abril tienen tan buena química entre ellos... Estoy súper confiado en que lo van a hacer genial y que será una gala maravillosa. Este año hay peliculones, hay mucha expectación. Yo voté hace poco y la verdad es que todas las candidaturas están súper reñidas.

CH: ¿Estarás allí?

D.R: Me va a ser un poco imposible, lo tendré que seguir desde otro lugar. Pero estaré apoyando como siempre.

CH: Vaya susto que tuviste.

D.R: Sí, bueno. Las imágenes que se han filtrado, bueno que hemos filtrado nosotros forman parte del documental que se estrenó el fin de semana pasado, Todos los caminos. Es una parte pequeñita de todo el proyecto, que habla sobre las enfermedades raras. Sí que es verdad que pese a que se presentó a la prensa y funcionó normalito, a partir de esas imágenes parece que eso ha despertado interés. Aunque sea por un porrazo que nos hemos pegado contra un coche, que un coche nos ha pegado a nosotros, si por eso se anima la gente a ir a la sala a ver el documental, bien. Lo que se recauda es para la investigación de la enfermedad y es un documental precioso, un canto a la vida, a la infancia, al derecho a ser niño independientemente de que tengas una enfermedad...

CH: Pero fue un gran sobresalto, ¿verdad?

D.R: Fue un gran susto, la verdad. Al principio no entiendes nada, luego la misma adrenalina hace que no sientas miedo... Al día siguiente cuando nos tocó volvernos a montar en la bici sentimos un poco de miedo, es como combatir un trauma al día siguiente. Eso se quita subiéndote a la bici otra vez. Al final se quedó en una cosa anecdótica, ha habido mucha gente que no lo pude contar y desde aquí respeto máximo en la carretera que al final hablamos de vidas humanas.

CH: Da gusto ver cómo te implicas en un montón de causas solidarias, de animales de personas, de enfermedades raras, ¿das abasto?

D.R: Sí que es verdad que de vez en cuando hace falta parar y ahora dentro de poco pillaré vacaciones. Me perderé en un agujero sin cobertura para volver con ganas de seguir currando, actuando y dando el callo con la Fundación.