China está mostrando al mundo sus altas capacidades en lo que a energías renovables refiere. El cada vez más creciente consumo energético, proveniente de su masiva ciudadanía y fruto del desarrollo de modelos de IA, ha llevado a la firma a que desarrolle soluciones como esta planta térmica de doble torre.
Tal y como afirman desde el South China Morning Post, el país acaba de abrir las puertas la torre oeste de la que se constituye como la primera central termosolar del mundo con una configuración de doble torre y un único generador.
Una masiva construcción, que aglutina más de 20.000 helióstatos que concentran la luz solar en un brutal receptor de 200 metros de altura, que calienta sales a más de 200 grados Celsius. Una construcción ubicada en el desierto de Gobi, el sexto más grande de todo el mundo.
La planta térmica de doble torre de China
El conjunto consta de dos torres de 200 metros, rodeadas por un campo de 27.000 espejos helióstatos. Ambas torres, separadas por una distancia de al menos un kilómetro, alimentan a un único sistema de turbinas.
Los helióstatos están dispuestos en círculos concéntricos para llevar la luz solar a cada una de las dos torres. Esta configuración calienta las sales fundidas de la planta a temperaturas de 200 grados, permitiendo a las torres almacenar calor.
Planta térmica.
El calor concentrado resultante, que puede alcanzar los 570 grados en las torres, genera vapor para impulsar las turbinas y mantener el flujo de energía. Esta es la clave; con esta solución, la planta puede generar energía prácticamente las 24 horas del día.
Y es que después del atardecer, la energía almacenada y generada durante las horas de mayor actividad solar continuará alimentando la planta, dotándola de operabilidad total durante toda la jornada. Un suministro energético que es, además, eficiente y estable, además de continuo.
Esta es la principal diferencia respecto a los paneles fotovoltaicos de las plantas solares, que convierten de forma directa la luz solar en electricidad. Los sistemas térmicos que aprovechan esta misma luz solar se aprovechan de su calor, no de su luz.
Además, cada una de las torres del sistema capta luz solar en diferentes momentos del día. La torre oeste recoge luz por la tarde, y la este la recoge por la mañana. El diseño del campo de helióstatos también afianza esta idea de eficiencia.
Helióstatos de la planta.
Básicamente, y según relatan desde el South China Morning Post, ambos campos de espejos están ligeramente superpuestos. Con este sistema, la planta necesita un número menor de espejos, facilitando la construcción y reduciendo los costes de la infraestructura.
Toda esta construcción genera un suministro constante de energía limpia, de forma eficiente y totalmente renovable. Un hito que además tiene margen de mejora, ya que está englobado en un centro de energía todavía más amplio.
Según relata Business Standard, China planea desarrollar este centro en la región, que aspira a suministrar electricidad a nada menos que medio millón de casas. Esta planta, por cierto, ha sido obra de la firma Three Gorges Corporation, ubicada en Guazhou, China.
