Ya estamos en pleno periodo electoral en muchas partes del mundo. No solo en España, donde el próximo 10 de noviembre se celebrarán nuevas elecciones generales, sino también en EEUU, donde Donald Trump se enfrenta a una difícil reelección.

Las redes sociales tendrán el papel más importante de su historia en estos procesos electorales. Es una tendencia que ya hemos visto los últimos años, pero que ahora realmente se ha convertido en tema de discusión en parlamentos y debates políticos.

La manera en la que Facebook y Twitter sirven para distribuir noticias falsas (o "fake news") les ha metido de lleno en más de un escándalo; ambas se han defendido apelando a la libertad de expresión, y a la necesidad de que la ciudadanía decida por su cuenta quién está mintiendo.

Twitter no mostrará anuncios políticos

Pero ahora Twitter ha decidido que ya está bien. Su CEO, Jack Dorsey ha anunciado en su cuenta oficial que Twitter dejará de admitir anuncios políticos; la decisión es global, así que afecta a todas las divisiones de la compañía y a todos los países.

Ningún político ni partido podrá contratar anuncios en Twitter para expandir su mensaje, sin importar el que sea; pero eso no significa que los mensajes políticos dejen de aparecer en su plataforma, por supuesto. Es sólo que las cuentas oficiales de los partidos y políticos tendrán que distribuir su mensaje por su cuenta.

Charles Platiau Thomson Reuters

Dorsey parece consciente de las consecuencias que puede tener esta decisión, pero cree que merecerá la pena. Una de las principales defensas de los anuncios electorales en redes sociales es que permiten llegar a usuarios que tienen otros puntos de vista; y de paso, romper su "burbuja".

Sin embargo, Dorsey cree que al permitir eso, Twitter estaría eliminando el derecho a decidir de esos usuarios, que conscientemente deciden no seguir ciertas cuentas. Cree que los partidos deberían "ganarse" su mensaje, no comprarlo.

También hay un temor de que esta decisión favorezca a los que ya están en el poder y pueden alcanzar a más usuarios; pero Dorsey recuerda la cantidad de movimientos sociales que nacieron en redes sociales, sin necesidad de anuncios.

El camino contrario a Facebook

Es más que evidente que esta decisión ha sido tomada en respuesta a los últimos escándalos protagonizados por Facebook; en concreto, relacionados con su política de permitir noticias falsas como anuncios, siempre y cuando sean de políticos.

Mark Zuckerberg fue criticado por esto en su reciente visita al congreso de los EEUU, por el gran poder que esto otorga a organizaciones y políticos que basan su estrategia en distribuir noticias falsas de sus contrincantes. Pero Facebook ha defendido que no puede hacer de censor, y decidir qué mensajes son ciertos y cuáles no.

Joshua Roberts Thomson Reuters

Ahora Twitter se "lava las manos", eliminando completamente la posibilidad de publicar anuncios políticos. Sin embargo, eso no acabará con sus problemas políticos; Twitter sigue siendo criticada por dar trato especial a algunos políticos como Donald Trump.

Twitter admite que el presidente de los EEUU ha vulnerado sus reglas, pero ha decidido en varias ocasiones no cerrar su cuenta usando argumentos muy parecidos a los de Facebook: que es la ciudadanía la que debe decidir.

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