Este año, con toda la locura que está trayendo consigo, se ha caracterizado por el auge de las teorías conspiranoicas relacionadas con el coronavirus. Especialmente virulento ha sido el caso del 5G, que ha sufrido la expansión de diversos dogmas contra él que lo relacionan directamente con el COVID-19.

En Reino Unido y en otros países ya hemos visto disturbios y actos de vandalismo contra infraestructura 5G. Los conspiranoicos vuelven a la carga, esta vez en Bolivia, país que está sufriendo actos de vandalismo a causa de estas campañas de desinformación. Tal y como informa el propio Arturo Murillo, Ministro de Gobierno de Bolivia, algunas torres de telefonía están sufriendo ataques de vandalismo.

Pero, ¿qué hay de nuevo en este caso? Ya hemos visto ataques a otras torres, incluso a trabajadores increpados por esta clase de gente. La diferencia es que en este caso, el acto de vandalismo ha quedado en saco roto: Bolivia aún no tiene 5G.

Ataques a torres de telefonía

La situación ha sido denunciada en redes sociales y dichos tweets han venido acompañados de fotos. En ellas, podemos ver torres de telefonía en llamas, más que probablemente a causa de vándalos aficionados a las conspiraciones del COVID-19. No se sabe quienes han sido los culpables de los ataques a estas torres, pero obedecen a un modus operandi proveniente de aficionados a la teoría de que el COVID-19 está relacionado con el 5G.

Como decimos, esta situación ha sido tan común que ha llevado a operadoras a lanzar comunicados conjuntos para pedir a los ciudadanos que dejaran en paz sus infraestructuras, adjuntando documentación que niega las acusaciones conspirativas al 5G. El problema de Bolivia es que en el país no hay 5G actualmente.

Así lo ha afirmado Evo Morales, ex-mandatario del país que se ha unido a Murillo en las denuncias acerca de estos actos vandálicos. Afirma que no hay tecnología 5G en el país, y que es necesaria una "campaña de información" paa evitar estos problemas. El propio Ministerio de Gobierno ha denunciado el caso, asegurando que esta acción "perjudicará el transporte y las actividades productivas de la región".

"El 5G es perjudicial"

Logo de 5G.

En los últimos meses, coincidiendo con la llegada del COVID-19 y la expansión de la conexión 5G por diversos países, numerosos grupúsculos de aficionados a las teorías conspirativas (alentados por personas de alta influencia) han estado perpretando campañas de desinformación que han sido rápidamente contrarrestadas por los Gobiernos nacionales.

Además de estas campañas, ciudadanos afines a estas creencias se han dedicado a realizar ataques contra torres 5G especialmente en el Reino Unido, además de increpar a trabajadores y responsables de la expansión de las redes 5G.

Las redes 5G no tienen en absoluto que ver con el coronavirus; los virus no se transmiten a través de estas redes, y no hay ninguna prueba científica que haya sido capaz de hallar una correlación entre el 5G y el coronavirus. Es básicamente imposible que puedas contraer coronavirus exponiéndote a redes 5G.

Numerosos estudios y reportes, como el de la IEEE Future Networks explican el por qué las radiofrecuencias de esta clase no son perjudiciales en absoluto para el ser humano. Pese a que las antenas 5G sean más pequeñas y estén situados en lugares más cercanos a los usuarios, no hay riesgo para las personas.

Según la Comisión Internacional de Protección de Radio no Ionizante, una organización independiente, el nivel máximo de radiofrcuencia al que alguien podría estar expuesto al 5G "es tan pequeño que no se ha observado ningún aumento de temperatura hasta la fecha".

Noticias relacionadas