Después de la "masacre" del pasado jueves en el campamento cisjordano de Yenín, el ataque a la salida de una sinagoga el viernes y el tiroteo por un menor palestino de 13 años en el día de ayer, el estado judío ha decidido enviar más unidades de las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) a a la Cisjordania ocupada.
Las tensiones han aumentado en los últimos meses ante el incremento de las operaciones militares de Israel en Cisjordania, tanto que podría derivar en una cuarta intifada.
Tanto el atentado en el día de ayer, como el del viernes se producen en reacción a la "operación" llevada a cabo por Israel el pasado jueves en la que al menos palestinos perdieron la vida, entre ellos una anciana, y otros veinte quedaron gravemente heridos.
El conflicto ha alcanzado un nível de máxima alerta, en el que los lanzamientos de misiles y las "operaciones antiterroristas" acaban deliberadamente con la vida de civiles de ambos bandos. En la última semana se ha producido el mayor ataque por ambas partes desde hace años, por el lado palestino en el día de ayer y por el israelí el pasado jueves.
La venganza palestina tomó fuerza desde lo ocurrido en Yenín. Además de los muertos y heridos, según informó La Luna Roja, los militares sionistas bloquearon a las ambulancias el acceso al campamento e irrumpieron en el hospital de la ciudad utilizando gases lacrimógenos en el área pediátrica. Algó que avivó aún más la ira.
Expertos de las Naciones Unidas, condenaron la redada israelí e instaron a la comunidad internacional a reaccionar para acabar con la violencia. "Deploramos el último ataque violento del Ejército israelí contra el campamento de refugiados de Yenín, así como el asesinato y las heridas de palestinos el jueves. La comunidad internacional no puede ni debe tolerar lo que parece reflejar una política deliberada y una práctica de Israel de utilizar la fuerza letal sin tener en cuenta los límites establecidos por el Derecho Internacional", destacó el coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en Oriente Próximo, Tor Wennesland.
Además, el grupo terrorista Hamás se manifestó advirtiendo de manera amenazante al estado judío que "pagará el precio de la masacre". Mediante su comunicadó instó a las milicias palestinas a que "respondieran al enemigo" y "se enfrenten a ellos en todas las zonas de Cisjordania y territorios ocupados".
Estos dos últimos ataques contra ciudadanos israelíes, culminan una oleada de violencia que lleva más de 30 palestinos, militantes y civiles, asesinados desde el inicio de 2023.
Funeral público de los palestinos asesinados.
Respuesta de Israel
La reacción de Israel ha sido el envío de tres batallones de combate adicionales a la Cisjordania ocupada. "La región se dirige a una escalada sin precedentes", dijo Ismail Haniyeh, líder del grupo militante palestino Hamas que controla la Franja de Gaza.
La cúpula militar israelí ha decidido el despliegue del batallón 101 de Paracaidistas, el batallón de Reconocimiento de Paracaidistas, y el batallón 17 de la Escuela de Profesionales de los Cuerpos de Infantería y Comandantes de Escuadrón.
Al visitar un hospital de Jerusalén que trata a las víctimas, el ministro de Seguridad Nacional de extrema derecha de Israel, Itamar Ben-Gvir, dijo que buscaría aumentar el número de permisos de armas. “Quiero armas en la calle. Quiero que los ciudadanos israelíes puedan protegerse”, dijo.
El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, que encabeza el partido Sionismo Religioso pro-colonos, dijo que exigiría acelerar los planes de construcción de asentamientos israelíes en Cisjordania , que su partido espera ver eventualmente anexados.
Israelí herido atendido por los servicios médicos.
Respuesta de Palestina
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) acusó a Israel de ser plenamente responsable de la "peligrosa escalada de violencia" en la zona.
“El liderazgo palestino responsabiliza plenamente al gobierno de ocupación israelí por la peligrosa escalada a la que ha llegado la situación debido a sus crímenes, que ascendieron a 31 mártires durante el mes en curso”, señaló el Consejo de Seguridad de la ANP en una reunión especial mantenida hoy, según informó la agencia oficial palestina Wafa.
Varias facciones palestinas, ajenas al Gobierno, entre ellas Hamás o la Yihad Islámica celebraron los ataques perpetrados en Jerusalén al considerarlos "actos heroicos" y como represalia a la incursión del Ejército israelí el jueves en Yenín.
Tras la letal incursión en Yenín el jueves, la ANP anunció la suspensión de su cooperación en material de seguridad con Israel, uno de los pilares de la estabilidad en la zona que incluye cuestiones que van desde el intercambio de información sobre potenciales ataques contra israelíes o sobre actividades de Hamás contra la ANP, hasta la coordinación para que oficiales palestinos puedan circular con facilidad entre distintas zonas del territorio.
A la violencia se suman además las multitudinarias manifestaciones que abarrotan las calles de Jerusalén en contra de las reformas del Gobierno de extrema derecha y ultraotodoxo creado por Netanyahu.