Bruselas

La OTAN cree que Vladímir Putin podría estar preparando una operación de "bandera falsa" con armas químicas en Ucrania como "pretexto" con el objetivo de justificar el uso de este tipo de arsenal biológico por parte de Rusia en la guerra. El uso de armas químicas en Ucrania supondría una nueva vulneración del derecho internacional por parte de Moscú que los aliados occidentales consideran "inaceptable", según ha avisado este martes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

No obstante, Stoltenberg no ha querido aclarar si se trata de una "línea roja" que obligaría a la Alianza a intervenir en la guerra. De hecho, el secretario general ha dejado claro de nuevo que la OTAN sólo se involucrará en el conflicto si Moscú ataca directamente a uno de los 30 Estados miembros. "Un ataque a un aliado se encontrará con una respuesta decisiva de toda la Alianza y protegeremos cada centímetro de territorio aliado", ha asegurado.

"Durante meses, hemos expuesto la larga lista de mentiras de Rusia. Afirmaron que no planeaban invadir Ucrania, pero lo hicieron. Dijeron que estaban retirando sus tropas, pero enviaron aún más. Sostienen que están protegiendo a los civiles, pero están matando civiles. Ahora están haciendo afirmaciones absurdas sobre laboratorios biológicos y armas químicas en Ucrania. Esta es otra mentira. Y nos preocupa que Moscú pueda organizar una operación de bandera falsa, que posiblemente incluya armas químicas", ha dicho Stoltenberg en rueda de prensa.

El secretario general de la OTAN ha resaltado que el Kremlin ya ha usado agentes biológicos antes, no sólo para atacar y matar a oponentes políticos, sino también para apoyar al régimen de Bashar al Asad en Siria. Una actuación que vulnera la convención sobre armas químicas que Moscú ha firmado.

¿Es el uso de armas químicas en Ucrania una línea roja que obligaría a la Alianza a intervenir? "Si (los rusos) utilizan armas químicas, pagarán un alto precio. Pero no voy a especular sobre ninguna respuesta militar por parte de la OTAN, excepto decir que la principal responsabilidad de la OTAN es garantizar que defendemos y protegemos a todos los aliados", ha asegurado Stoltenberg. 

La OTAN ha descartado establecer una zona de exclusión aérea en Ucrania -tal y como reclama su presidente, Volodímir Zelenski- con el argumento de que ello le abocaría a un conflicto directo con Rusia. Un enfrentamiento con Moscú que tanto Washington como Bruselas aseguran que no desean.

Canales de comunicación con Moscú

Al secretario general de la OTAN le han preguntado también por el ataque de Moscú a una base militar a apenas 25 kilómetros de la frontera polaca o por el dron que se ha estrellado a las afueras de Zagreb (Croacia). "Cuando vemos combates cerca de las fronteras de la OTAN, siempre hay el riesgo de incidentes y accidentes y por eso tenemos que hacer esfuerzos para prevenirlos y, si ocurren, garantizar que no se descontrolen y creen situaciones peligrosas", ha respondido.

En este sentido, la OTAN mantiene canales de comunicación abiertos con el Ejército ruso para prevenir este tipo de escaladas, sostiene Stoltenberg. Además, los aliados han reforzado considerablemente la protección del flanco este. "Ahora hay cientos de miles de fuerzas en alerta máxima en toda la Alianza. Cien mil soldados estadounidenses en Europa. Y alrededor de 40.000 efectivos bajo mando directo de la OTAN, la mayoría en la zona este de la Alianza", ha destacado.

A ello hay que sumar que Estados Unidos está desplegando baterías Patriot en Polonia, y Alemania y Holanda están haciendo lo propio en Eslovaquia.

Pero la invasión rusa de Ucrania obliga a replantearse por completo la estrategia de la OTAN a largo plazo. Eso es lo que harán los ministros de Defensa de la Alianza en la reunión extraordinaria que celebran este miércoles en Bruselas. El objetivo es fortalecer de forma permanente la posición defensiva en los países del Este.

"En tierra, esto podría incluir sustancialmente más fuerzas en la parte este de la Alianza, con mayor preparación y con más equipo preposicionado. También consideraremos aumentos importantes en nuestros despliegues aéreos y navales, reforzando nuestra defensa antiaérea y antimisiles integrada, fortaleciendo nuestras ciberdefensas y realizando más ejercicios conjuntos", ha avanzado Stoltenberg.

Los ministros de Defensa encargarán a los comandantes militares de la OTAN que desarrollen planes en este sentido, que se aprobarán en la cumbre de Madrid el próximo junio.

El secretario general de la Alianza ha señalado que este refuerzo de la defensa "requerirá grandes aumentos en la inversión". Por ello, ha animado a todos los Estados miembros a "gastar un mínimo del 2% del PIB en defensa". "Debemos hacer más, así que también debemos invertir más", ha insistido.

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