La ciudad ucraniana de Rivne ha amanecido en conmoción tras conocer que una mujer de 21 años ha matado a su bebé de tres semanas "por celos" de su marido. La joven creía que su marido, de 26, quería más a su hija que a ella.
Cuando su marido salió a la calle para tirar la basura, la joven aprovechó y le cortó la garganta al bebé. "Salió unos minutos y ella agarró un cuchillo de cocina y abrió la garganta de la niña", cuenta al Daily Mail María Momot, la madre del hombre.
Él encontró a su hija de meses en un charco de sangre en el suelo. Llamó a emergencias, pero no pudieron hacer nada por la pequeña. Según ha contado a las autoridades su mujer le preguntó: "¿Por qué lloras?".
"Mi hijo y yo queremos mucho a esa niña. Le dimos todos nuestros pensamientos y cuidados", explica Momot. La Policía encontró el cuchillo, manchado de sangre, en el fregadero de la cocina.
"La madre no pudo explicar por qué lo hizo, ni siquiera podía recordar ese día", dice el portavoz de la policía, Anton Kruk. Las autoridades creen que la mujer podría haber sufrido una crisis mental, que le habría llevado a matar a su hija, provocada por una meningoencefalitis -inflamación del cerebro- diagnosticada cuando estaba embarazada.
La joven será sometida a un examen psiquiátrico para evaluar su estado mental, y verificar si cuando cometió el crimen estaba en plenas facultades mentales. Si el examen resulta negativo, y la madre era plenamente consciente de lo que hacía, podría enfrentarse a 15 años de cárcel.