Agencias

Al menos 42 personas han muerto y más de 130 han resultado heridas este domingo en un ataque suicida durante una reunión del partido religioso Jamiat Ulema-i-Islam (JUI-F), en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, en el norte de Pakistán. Por el momento, el ataque no ha sido reivindicado por ningún grupo insurgente.

"Durante la convención de JUI-F, 25 personas murieron y más de 100 resultaron heridas. Según la información inicial, se trata de un ataque suicida que tuvo lugar hacia las 16:00 horas (11:00 horas en España) cuando había cientos de personas presentes", dijo un oficial de la estación de Policía de la localidad de Khar, Gul Khan.

La fuente advirtió de que el número de víctimas podía aumentar debido al gran número de asistentes al evento, celebrado en el distrito de Bajour, algo que finalmente ha sucedido. 

Pakistán ha experimentado un aumento de la violencia armada desde la llegada al poder de los talibanes afganos en Kabul en agosto de 2021, que reactivó los ataques de sus hermanos ideológicos paquistaníes, especialmente en las provincias fronterizas con Afganistán de Khyber Pakhtunkhwa y Baluchistán.

La Policía de Jíber Pajtunjua ha señalado a Estado Islámico como posible autor del atentado. "Seguimos investigando y recopilando información sobre la explosión. La investigación inicial muestra que Estado Islámico, una organización proscrita, estuvo implicada", han asegurado las autoridades en declaraciones recogidas por la cadena Geo TV, según ercoge Europa Press.

El principal grupo paquistaní, el Tehreek-e-Taliban Pakistán (TTP), anunció el pasado diciembre el fin del alto un fuego alcanzado con Islamabad, al que acusó de incumplir sus compromisos en unas negociaciones de paz.

El país fue testigo de 271 ataques militantes durante la primera mitad del año, en los que 389 personas murieron y otras 656 resultaron heridas, según un informe publicado a principios de julio por el Instituto de Estudios de Seguridad y Conflictos de Pakistán.

Un incremento significativo de las cifras en comparación al mismo periodo de 2022, cuando Pakistán sufrió 151 ataques que causaron 293 muertos y 487 heridos.