La noche de este jueves fue recibida en Bakhmut por cientos de bombas que iluminaban el cielo antes de caer sobre la ciudad. Rusia ha reorganizado la colaboración entre el Ejército y el Grupo Wagner y, con ello, el asalto ha tomado un impulso renovado. Finalmente, el intenso fuego de artillería de los dos últimos días ha obligado a las tropas ucranianas a retirarse de parte de la ciudad este viernes.

Así lo ha comunicado el Ministerio de Defensa de Reino Unido. "Rusia ha reactivado su asalto a la ciudad de Bakhmut en el óblast de Donetsk, ya que las fuerzas del Ministerio de Defensa ruso y el Grupo Wagner han mejorado la cooperación", ha informado el servicio de inteligencia británico.

"Las fuerzas ucranianas enfrentan importantes problemas de reabastecimiento, pero se retiraron ordenadamente de las posiciones que se vieron obligadas a ceder", añadió el ejército británico en su actualización al parte diario.

De esta forma, Wagner ha vuelto a tomar la delantera dentro del ataque ruso en una batalla que se prolonga desde hace siete meses, la más mortífera de la guerra para las tropas de ambos lados. Anteriormente, el líder del grupo mercenario Yevgueni Prigozhin se había quejado del escaso apoyo de las fuerzas armadas regulares a sus fuerzas y habían pasado unas semanas mucho menos activas en el campo de batalla.

"La defensa ucraniana todavía tiene los distritos occidentales de la ciudad, pero ha sido objeto de un fuego de artillería ruso particularmente intenso durante las últimas 48 horas", dijo el parte británico.

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Defensa añadió que las unidades de Wagner ahora se estaban enfocando en avanzar en el centro de Bakhmut, mientras que los paracaidistas rusos los relevaban en los ataques a los flancos de la ciudad.

Bakhmut, que tenía una población de 70.000 personas antes de la guerra, ha sido el principal objetivo de Rusia en una ofensiva de invierno que hasta ahora ha arrojado escasas ganancias al Kremlin a pesar de que los combates terrestres de infantería han tenido na intensidad no vista en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.

La captura de la ciudad sería la primera victoria sustancial de Rusia en ocho meses. Moscú dice que su relevancia reside en que abriría una ruta para capturar más territorio en la región Donbás del este de Ucrania, un importante objetivo de guerra. No obstante, Bakhmut también se ha convertido en una ciudad de gran valor simbólico.

Ucrania, que se está preparando para su propia contraofensiva, parecía que abandonaría sin remedio Bakhmut a fines de febrero, pero tras una resistencia que resultaba improbable anunció en marzo que seguiría luchando allí. Rusia está sufriendo un mayor número de bajas al tratar de asaltarla y el plan de Zelenski es continuar desgastando a las tropas invasoras.