Sandra Barneda, presentadora de programas como La isla de las tentaciones y exitosa escritora, vive en el centro de Madrid en un dúplex reformado de 200 m². La vivienda, donde también habita su perro Leo, combina arquitectura clásica y decoración moderna.
El piso destaca por sus techos altos con vigas de madera y contraventanas originales que potencian la luz natural. Estas características refuerzan la sensación de amplitud y aportan calidez al estilo rústico renovado elegido por Barneda.
Uno de los grandes atractivos es su espacioso salón, que incluye chimenea de mármol negro, piano y una librería personal con estantes irregulares.Este rincón, pensado para leer y escribir, muestra su pasión por la literatura y el diseño.
La reforma ha respetado elementos originales como vigas de madera y techos altos, acentuando un estilo rústico moderno. Grandes ventanales y contraventanas permiten una iluminación natural que realza el confort del hogar.
El salón es el corazón de la casa: sofá beige, chimenea negra y piano conviven con una librería de ensueño. Sandra ha habilitado allí un rincón de lectura con sillón lounge, ideal para momentos de relajación y trabajo.
La cocina, con suelo damero blanco y negro, y mobiliario gris retro, destaca por su estética cuidada. Junto a ella, un comedor con mesa de madera natural ofrece el entorno perfecto para reunirse en familia.
El vestidor sigue la línea rústica con armarios de madera y estructura clásica, combinando funcionalidad y estilo.En el despacho, muebles vintage y consola antigua crean un espacio íntimo para su faceta literaria.
Sandra también ha habilitado un pequeño gimnasio doméstico en el salón, incluyendo bicicleta estática y esterilla para yoga. Esta zona refleja su rutina de deporte y bienestar sin salir de casa.
La decoración ha sido diseñada por la propia Sandra tras una reforma integral. Recorre mercadillos del Rastro para encontrar piezas vintage y detalles únicos que reflejan su personalidad.
La biblioteca es una pieza central en esta vivienda de 200 m². Estantes diseñados por ella albergan una extensa colección que da cuenta de su pasión por la lectura.
La vivienda está pensada para disfrutarla todo el año, con espacios versátiles que se adaptan a las diferentes estaciones. En invierno, la chimenea se convierte en el corazón del hogar; en verano, la luz natural y las plantas distribuidas por el piso refrescan cada estancia.
Sandra ha mostrado su casa en varias entrevistas y publicaciones, donde ha confesado que fue ella misma quien eligió cada detalle de la decoración. “Quería un espacio que hablara de mí, que reflejara lo que soy y lo que me inspira”, explicó en una ocasión.
Los suelos de madera natural, las lámparas de diseño y los cuadros que adornan las paredes completan una vivienda que transmite calma y sofisticación. Todo está medido, pero sin caer en lo impersonal: es un hogar vivido y con alma, como ella misma lo define.
Su perro Leo también tiene su espacio favorito en la casa. Sandra ha acondicionado rincones para que su mascota pueda descansar junto a ella mientras trabaja o lee. Este vínculo emocional con su hogar convierte el piso en algo más que una simple vivienda.
El piso de Sandra Barneda en el centro de Madrid combina una reforma respetuosa con su esencia rústica, funcionalidad familiar y espacios creativos. Con 200 m², techos altos y una biblioteca de ensueño, se convierte en un refugio urbano donde vivir, leer y crear en absoluta calma.