Cada vez son más los rostros conocidos que se sientan en el famoso sillón de Vicky Martín Berrocal (52 años) para abrirse en cuerpo y alma en su pódcast, A solas con.
Sin embargo, una de las visitas más esperadas y emocionantes de la diseñadora fue la de su madre, Victoria Martín quien, a sus 76 años, sigue siendo un pilar fundamental en la familia.
Pero no solo su fortaleza es digna de admirar, también la belleza que aún defiende con poderío y elegancia. Mucho tiene que ver con su genética, pero también con un simple truco de belleza que sorprende a todos.
"Solo me he echado Nivea en la cara, durante toda mi vida." Así de sencillo, con su característico humo arrollador y una vitalidad que ya quisieran muchas mujeres con 30.
Sin duda, un discurso que rompe todos los tópicos sobre el envejecimiento y con el se convirtió en protagonista absoluta de uno de los episodios más míticos del pódcast de su hija.
Rutina de juventud
La madre de Vicky Martín Berrocal confesaba cuál es su verdadera "rutina" para mantenerse joven. Y su respuesta ha dejado boquiabiertos a los seguidores: ni gimnasio, ni vitaminas, ni sérums de lujo… solo crema Nivea, vino y genética.
La conversación arranca con la pregunta del millón: ¿Qué has hecho para estar así a los 76? Y, lejos de mencionar rutinas eternas o cosmética avanzada, Victoria desarma a todos con una sola frase:
"Yo solo me he echado crema Nivea en la cara toda mi vida", sin tratamientos, sin protocolo beauty, sin rituales coreanos de 10 pasos.
Nivea de lata azul y punto. Un gesto mínimo con el que asegura haber hidratado su piel desde siempre, sin cambiar de producto y sin obsesionarse con el paso del tiempo.
Nada de gimnasio
Su estilo de vida tampoco encaja en el ideal wellness actual. Ella misma reconoce divertida que "no ha tomado ni una vitamina" ni "ha hecho ejercicio jamás".
Nada de pilates, nada de yoga ni tampoco el clásico "caminar 10.000 pasos al día". A sus 76, no solo no se arrepiente, sino que defiende que nunca le ha hecho falta.
La madre de Vicky Martin Berrocal (76): "Estuve casada 60 años, le ponía un límite de 3 meses para su relación extramatrimonial"
Pero también hay otro punto que ha generado más impacto entre los oyentes, es su confesión sobre la hidratación.
En un mundo donde se repite sin parar que hay que beber dos litros diarios, Victoria suelta la bomba: "Yo bebo muy poca agua. A lo mejor seis botellas al año."
Victoria Martín en su visita a El Hormiguero.
Aun así, se mantiene con energía, vitalidad y una piel que, según su hija, "muchas mujeres envidiarían". ¿Su secreto? Ella lo tiene claro: la genética.
Vino a diario
Si hay algo que sí forma parte constante de su rutina es el vino: "El vino tinto es sanísimo. Me tomo una copita comiendo y otra por la noche. Y si salgo a almorzar, puedo tomarme hasta una botella."
Victoria asegura que lo disfruta, que le sienta bien y que forma parte de su vida desde siempre. Sin culpa, sin excesos que ella considere excesos, y con la naturalidad que caracteriza todo su discurso.
Cada una de sus confesiones rompe con los mantras actuales del antiaging, pero Victoria va un paso más allá cuando revela sus resultados médicos: "Lo tengo todo controlado: colesterol, azúcar… todo perfecto".
A su edad, con su ritmo y sin un "plan de cuidados" como tal. En el pódcast, eso sí, lanza una advertencia importante: lo que le funciona a ella no tiene por qué funcionarle a otras mujeres.
