Teñirse el pelo es uno de los rituales de belleza más comunes y, a su vez, transformadores, para una persona, pero también uno de los que más "castiga" el cabello. Ingredientes químicos, abuso de tintes de mala calidad, malos cuidados… todo suma a la hora de cuidar la salud capilar.
Pero eso son los errores que todos sabemos identificar a la hora de proteger nuestro cabello. Aun así, existen otros, muy interiorizados por todos que, sin saberlo, lo perjudica igual o peor. Uno de ellos, ir a la peluquería con el cabello recién lavado, pensando que era lo mejor, justo para teñírtelo a continuación.
Sentimos decirte que podrías estar cometiendo un error que debilita tu cuero cabelludo y arruina el resultado del tinte. El prestigioso estilista Álex Sestelo, director del salón que lleva su nombre, ha sido tajante: lavarte el pelo justo antes de teñírtelo es una de las peores cosas que puedes hacer si quieres cuidar tu cuero cabelludo y conseguir un color duradero y vibrante.
¿Por qué no debes lavarte el pelo antes de teñirlo?
Es una duda más común de lo que pensamos: ¿es mejor ir con el pelo limpio a la peluquería? ¿No se supone que así "agarra mejor" el color? Pues no. Según Sestelo, la mejor opción es esperar entre 24 y 48 horas después del último lavado antes de aplicar el tinte.
El motivo es muy sencillo. El cuero cabelludo genera aceites naturales que actúan como una barrera protectora frente a los químicos agresivos del tinte. Si eliminas esa capa protectora al lavar el cabello justo antes de teñirlo, la piel queda más expuesta, irritable y vulnerable a sufrir irritaciones o picores.
"El pelo debe estar limpio, pero no recién lavado. Hay que dejar que el cuero cabelludo tenga sus aceites naturales para protegerse del tinte", explica el experto.
Otro error frecuente: usar mascarillas justo antes
Otro fallo que muchas cometemos es aplicar mascarillas o acondicionadores justo antes de teñirnos. Pensamos que, al hidratar el pelo, el tinte quedará más uniforme. Sin embargo, el efecto puede ser justo el contrario.
Sestelo advierte que estos productos crean una película sobre la fibra capilar que puede impedir la correcta penetración del tinte. Resultado: un color irregular, poco duradero o con zonas mal teñidas.
Lo ideal, según el estilista, es que el pelo esté libre de productos de styling, pero con sus aceites naturales intactos. Así, el tinte actúa de manera uniforme y con menor agresividad sobre el cuero cabelludo.
¿Qué hacer después de teñirse?
Una vez sales de la peluquería con tu nuevo color, la tentación de volver a lavar el pelo para sentirlo "más limpio" puede jugar en tu contra. Álex Sestelo recomienda esperar al menos 48 horas antes del primer lavado post-tinte.
Este tiempo es clave para que la cutícula del cabello, que se abre durante el proceso de teñido, tenga tiempo de cerrarse correctamente. Así se encapsula el color, evitando que se desvanezca en el primer lavado.
Y atención porque la temperatura del agua también importa. Olvídate del agua caliente, que abre la cutícula y arrastra el pigmento. Elige agua tibia o fría para mantener el color en su sitio y prolongar la duración del tono.
Cómo cuidar tu pelo teñido
Teñirse el pelo no es solo cambiar de look: es adquirir un compromiso con el cuidado capilar. Sestelo comparte sus claves para lucir un color perfecto durante semanas:
- Usa productos específicos para cabello teñido
No vale cualquier champú. Necesitas fórmulas que protejan el pigmento y refuercen la fibra capilar. Si además tienen ingredientes nutritivos, mejor que mejor. - Hidrata en profundidad
El cabello teñido tiende a resecarse, y un pelo seco pierde color con más facilidad. ¿La solución? Mascarillas nutritivas y tratamientos intensivos una o dos veces por semana. - Protección térmica siempre
Si utilizas secadores, planchas o tenacillas, no te olvides del protector térmico. El calor excesivo es uno de los mayores enemigos del color: lo apaga, lo oxida y daña la fibra capilar. - Filtro solar para el cabello
Sí, el sol también estropea el tinte. Usa productos capilares con filtro UV, especialmente en verano. Así evitarás que el sol oxide el pigmento y cambie el tono de tu pelo. - Espacia los lavados
Lavarse el pelo todos los días es contraproducente. Intenta espaciar los lavados lo máximo posible y recurre a champús en seco si lo necesitas. Menos agua, más color.
¿Y si tienes canas?
Una de las razones más comunes para teñirse es cubrir las canas. Pero eso no significa que tengas que retocar el color constantemente. Sestelo recomienda técnicas como el balayage o las mechas babylights para disimularlas de forma natural, integrándolas con tu tono base.
Si prefieres una cobertura total, los tonos permanentes son tu mejor aliado. La clave está en elegir un tono que se funda con tu color base y no requiera retoques demasiado frecuentes.
Álex Sestelo lo resume de forma clara: el secreto de un tinte bonito y duradero está en la salud del cabello. Un pelo cuidado, hidratado y bien protegido luce más brillante, suave y con el color intacto por más tiempo.