Para poder entender lo qué es la epigenética, debemos empezar explicando qué son nuestros genes. Los genes son la unidad molecular de herencia genética, pues almacena la información genética que nos indica cómo somos y lo que trasmitimos a nuestra descendencia. Básicamente son los diferentes segmentos del ADN, en palabras comunes es como el código informativo de todo nuestro organismo.

Los genes nos marcan no solo como somos físicamente (altos, bajos, rubios, morenos…), sino también a nivel salud, las enfermedades que podemos padecer y que transmitimos. Cómo será nuestro envejecimiento, por ejemplo, también es otro de los factores que marcan los genes.

La epigenética es cómo el entorno externo puede cambiar a nivel genético, cómo nos afecta la parte externa de todo lo que nos rodea de forma interna, modificando esos genes, haciendo que la información que tenemos desde que nacemos, se modifique, lo que puede hacer variar algunas de las condiciones de las que estábamos ya destinados o predeterminados con esa información.

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Así, por ejemplo, unos hermanos gemelos idénticos genéticamente, con los años cada vez se diferencian más entre sí.

Aspectos como la alimentación, actividad física, dónde vivimos, o simplemente el estilo de vida pueden hacer cambiar esta información genética, es lo que llamamos epigenética, absolutamente todo lo externo a nuestro propio organismo.

Hay una importante diferencia a posibles cambios genéticos al nacer, y esta es en que la epigenética es reversible, ya que no cambia la secuencia del ADN, sino que algunos genes estén activos o inactivos.

Estos genes van a provocar unos cambios en la expresión de las distintas proteínas involucradas en nuestro metabolismo que va a provocar ciertos cambios. Al no tener todos los genes activos, algunas reacciones metabólicas no se producen, es por ello van a hacer cambiar, como estábamos predestinados es como si no toda la información llegara completa.

Resumiendo, va a provocar que se exprese o no cierto gen, son esos cambios genéticos provocados por las sustancias químicas externas que nos afectan a nosotros mismos.

Dejamos de fabricar algunas sustancias químicas, que forman parte directa del metabolismo, y en consecuencia estas reacciones metabólicas no se producen, por ejemplo, las proteínas que se producen para el crecimiento óseo no se producen en las células musculares, lo que daría un deterioro en el desarrollo óseo y muscular.

Como he mencionado antes, estos cambios epigenéticos son reversibles. Pero a medida que van dividiéndose las células junto con esos cambios, pueden del mismo modo heredarse a las siguientes generaciones, es por ello los cambios epigenéticos se pueden hacer permanentes en las siguientes generaciones, dependiendo del tiempo que se produce este cambio, si no ponemos los medios para revertirlos.

De hecho, modificaciones genéticas como el cáncer, trastornos metabólicos, degenerativos se relacionan muchas veces por cambios epigenéticos.

Claves de la epigenética

Controla los genes. Los genes ordenan la especialización de cada célula, el desarrollo, los procesos metabólicos, y es lo que va a marcar el desarrollo de cada persona, pero la epigenética debido a los efectos externos hace que los genes se activen o se desactiven

Los cambios o factores, se encuentran en todas partes, de hecho, podemos mencionar que es todo lo exterior a nosotros, desde nuestra alimentación, como dormimos, aire que respiramos, las rutinas diarias, entre otros aspectos, son los que van a causar estas modificaciones químicas que provocan que se activen o desactiven algunos genes, lo que llamamos como epigenética, o incluso pueden alterar los genes modificando su función a anormal provocando enfermedades.

Nos hace únicos, de hecho, la genética es la que nos va a diferenciar en el nacimiento de como somos, sin embargo, debido a la epigenética todavía nos va a hacer más únicos, por ejemplo ¿por qué a algunas personas les gustan unos sabores y a otros no?, según los alimentos que nos hayan dado de pequeños.

Es reversible, podemos eliminar estos genes erróneos o estos genes inactivos, y de hecho la epigenética se suma de las teorías para la curación de enfermedades graves, crónicas o incurables, como el cáncer, o simplemente como el envejecimiento, se puede considerar una nueva esperanza de tratamientos personalizados y apertura de nuevas líneas para la investigación

Cambios en los genes

Acciones de los factores externos frente los genes, ¿cómo se producen estos cambios epigenéticos en el ADN?

Metilación del ADN: lo que ocurre es que se une un grupo metílico (un átomo de carbono y tres de hidrógeno) y con ello no se expresa o no se puede leer el gen o la parte del ADN metilado. Si conseguimos desmetilar el gen se volverá a leer o volverá a poder ser útil la información.

Es, en palabras comunes, como si al modificar la estructura molecular de este gen, en consecuencia, no funcionara, se apaga.

Modificación de las histonas: las proteínas llamadas histonas, envuelven los genes de forma compactada y esto hace del mismo modo que se inactiven los genes, si eliminamos estas histonas el gen puede continuar leyéndose o facilitando la información al resto de las células para el metabolismo.

En palabras comunes, es como si al gen le cubriéramos con una coraza y en consecuencia se desactivara, no pudiera pasar la información genética propia.

Producción de micro ARN: este ARN va a producir otras proteínas que van a formar competencia con la información genética del ADN.

En palabras comunes, se añade en el ciclo metabólico este micro ARN y será esta la información que tendrán las células no las del propio gen, que quedara en cierto modo anulado o desactivado.

Es lo que concretamente ocurre en las enfermedades víricas en las que el ARN del virus entra en competencia con el nuestro propio, actualmente puede ser uno de los efectos que puede ocasionar la infección por la Covid-19.

Epigenética y el paso de los años

Entendiendo como nos afecta todo lo exterior, se hace comprensible que los cambios epigenéticos se empiezan a producir desde que nacemos.

Aunque al nacer tenemos el mapa genético, cuando vamos creciendo y con el paso de los años, se va modificando los genes, lo que entendemos como epigenética y será lo que determinará al final como seremos.

Así, la epigenética de cuando nacemos no es igual a la de que tenemos cuando somos adultos.

Como he dicho algunos cambios son reversibles dependiendo de los cambios exteriores del mismo modo que aparecen, esto se demuestra con los fumadores en los que los cambios genéticos aparecen en más o menos grado dependiendo de la cantidad y tiempo que han estado fumando o una vez que se deja de fumar.

Al fumar se metilan los genes, quedando modificados, evitando la expresión de estos, cuanto más tiempo haga que se ha dejado de fumar y cuanto más tiempo se ha estado fumando es lo que va a depender de esa inactivación genética o no.

Los gérmenes o patógenos, pueden modificar con las infecciones la información genética para conseguir ser supervivientes en nuestro organismo, seria con el micro ARN propio del virus.

Tenemos claro ya que algunas modificaciones genéticas pueden provocar un aumento del riesgo de padecer cáncer, en este paso, la epigenética puede ser un método más para diagnosticar más posibilidades de sufrir algún tipo de cáncer o de cómo prevenirlo.

Consideramos también que la epigenética es muy importante en el desarrollo del bebé en las mujeres embarazadas, de hecho, según cómo se alimenten puede provocar ciertas modificaciones epigenéticas en el feto que pueden durar años.

Cosmética y epigenética

La epigenética, también está involucrada en el envejecimiento y en el estrés oxidativo de las células. El envejecimiento, está muy relacionado con los factores xenobióticos como pueden ser la polución, la radiación UV o el estrés.

Como he dicho antes, los cambios genéticos debidos a la epigenética son reversibles, esta sería la teoría ideal en la que detendría ese envejecimiento o se revertiría, y es lo que actualmente se está investigando en cosmética.

Por otra parte, podría ser una acción en la que provocar cierto cambio epigenético gracias a la cosmética, pudiera activar algún gen o desactivar un gen que este implicado en el envejecimiento.

Podría ser, por ejemplo, añadiendo microARN, en la que podría por ejemplo producir más colágeno o más elastina. Pero todos sabemos que la cosmética son tratamientos externos, lo que dificulta que a nivel externo o superficial pueda provocar esos cambios rápidamente. Es una de las posibles limitaciones, pero está claro que a nivel sensorial van a ser muy importantes.

Asimismo, es importante la influencia de la salud en el envejecimiento y los cosméticos, en el cuidado de la piel.

Si en la información genética está predeterminado cómo nuestro organismo va a repararse o como va a envejecer, la influencia de la cosmética sobre estos genes, la epigenética es la clave para evitar el envejecimiento o acelerar el proceso de regeneración. Esto se debería lograr con algunos ingredientes específicos con capacidad de actuar frente al epigenoma para influir en la expresión del ADN de las células basales de la dermis que actúa frente la regeneración celular.

Entre estos activos están:

  • Los péptidos, alguno de ellos es epigenActive © que actúa frente los receptores de los factores de crecimiento.

  • Las conocidas ya células madre de los cosméticos.

  • Las sirtuinas.

  • Mejorar la formación de colágeno, para así mejorar la firmeza de la piel y la elasticidad de la piel.

  • Mejorar la producción de ácido hialurónico.

Evidentemente, son los comienzos de una cosmética nueva, que está empezando a emerger, de hecho, algunas marcas ya están incluyendo sus activos en el conjunto de sus fórmulas.

Las podríamos considerar dentro del conjunto de tratamientos antiedad.