La mañana del 26 de septiembre, como cada día, Anane Ryma, salió de la casa familiar a las 6:00 horas de la madrugada para coger el autobús que la lleva de su pequeña localidad en Makouda a Tizi Ouzou, la capital de la región.



De repente, se acercó un hombre, la roció con gasolina y le prendió fuego con un mechero. Inmediatamente, la espalda y el cuello de esta joven de 28 años comenzaron a arder. Ese lunes estaba sola y no acompañada de otras tres chicas, como de costumbre. Aun así, consiguió llegar a su casa, donde se desplomó, y fue trasladada al hospital.



Esa mañana quedó truncada la vida de esta profesora de francés, graduada en la Universidad Politécnica de Ingeniería de Nantes, en Francia. Antes del anochecer, el responsable del intento de asesinato, un vecino de Ryma con quien no aceptó casarse, se entregó a la policía.

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La víctima ingresó en la unidad de cuidados intensivos en el Hospital Universitario de Tizi Ouzou con quemaduras de tercer y cuarto grado en todo el cuerpo, las más peligrosas porque afectan a todas las capas de la piel, músculos, tendones y huesos, con posibilidad de que sean potencialmente mortales.



Sin embargo, en este centro no disponían de los medios adaptados para la gravedad y profundidad de las heridas de Ryma, con más del 60% del cuerpo quemado. Por ello, se consideró que para la supervivencia de Ryma era necesario su traslado a un hospital en el extranjero, preferentemente a París o Madrid, según los facultativos.



Así, su familia y sus amigos emprendieron una campaña para solicitar donaciones, “Ryma te necesita a ti, a todos nosotros para seguir viviendo”. De esta manera, la fatídica historia se convirtió en viral en las redes sociales y contó con la solidaridad de los argelinos.



Finalmente, fue evacuada el 14 de octubre en un avión sanitario rumbo a España, gracias a la intervención de ABM International. Esta institución argelina organiza traslados de enfermos graves a Francia, Turquía y España.



Desde entonces permanece ingresada con pronóstico estable en la unidad de quemados del Hospital de La Paz de Madrid, y acompañada de su hermano. Con las ayudas podrán hacer frente a los 100.000 euros que cuesta el tratamiento. De momento, la familia ya dispone de la mitad de esta cantidad gracias a las donaciones.



A pesar, de tener una beca para seguir sus estudios en Francia, la familia no consiguió el visado para trasladarla al Hospital Saint-Louis de París. Para obtener los papeles tenía que hacer frente a un pago anticipado de más de 300.000 euros por una estancia hospitalaria de algo más de dos meses.



Sin embargo, las autoridades españolas le expidieron un visado y en La Paz no le exigen el pago del tratamiento por adelantado. Además, es tres veces menos costoso que en Francia.

32 feminicidios en Argelia

Esta historia que ha conmocionado a la sociedad argelina no es una tragedia aislada. En algunos casos las mujeres son maltratadas, pero también en otros muchos terminan sin vida. La organización Feminicidios Argelia, compuesta por dos argelinas, recuenta hasta 32 asesinatos de mujeres perpetrados por hombres en Argelia este año, de enero a agosto. En 2020 y 2021, cada año 55 mujeres fueron asesinadas por hombres en Argelia. El 2019, se registraron 74 feminicidios.

Los motivos suelen ser por rechazar un matrimonio, como el caso de Ryma, o solicitar el divorcio. Pero el último asesinato difundido en Argelia, es el de Samia Djemoui. Esta mujer de 40 años murió de un golpe en la cabeza que le asestó su marido, que también mató a sus tres hijos, estrangulándolos.

Es decir, estos asesinatos se producen en la mayoría de los casos por familiares o personas cercanas a la víctima. El problema es que no se denuncian o no trascienden, sobre todo fuera de las ciudades. Además, cuentan con la impunidad judicial.

Así, las leyes que tipifican como delito la violencia de género en el código penal argelino contempla el perdón de la víctima, con el que se cierra el proceso. Las mujeres no siempre cuentan con el apoyo de la familia o gozan de la libertad para condenar a su maltratador. Por supuesto, no disponen de asistencia ni medidas de protección, lo que las pone en peligro incluso después de romper con su verdugo.

Además, el artículo 279 del código penal en el país magrebí recoge una circunstancia atenuante cuando el feminicidio lo comete el cónyuge en caso de adulterio.

No obstante, Argelia es el país africano con menos tasa de feminicidios, además de registrar un descenso en la última década, según el informe del Parlamento Europeo en 2021, Feminicidio, sus causas y tendencias recientes: ¿Qué sabemos?.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que solo se registran los casos en las grandes ciudades y los homicidios voluntarios. Por lo tanto, no es la cifra real. De hecho, el término feminicidio no aparece en la legislación argelina. Además, se encuentran contradicciones entre la constitución, que defiende la igualdad entre hombres y mujeres, y el código de la familia. También existe un vacío en la prensa nacional.

En todo caso, el feminicidio es un tema global, como se desprende de las estimaciones que indican que 87.000 mujeres fueron asesinadas intencionalmente en 2017 en el mundo, aunque se desconoce la cifra exacta y se sospecha que el número es mayor. La pandemia de Covid-19 ha empeorado la situación y ha reducido el acceso a los servicios.

En 2020, unas 47.000 mujeres y niñas de todo el mundo fueron asesinadas por sus parejas u otros miembros de la familia, recoge el informe Los asesinatos de mujeres y niñas por parte de su pareja u otros miembros de la familia de la ONU. Esto significa que, en promedio, una mujer o niña es asesinada por alguien de su propia familia cada 11 minutos.