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¿Te imaginas que tu perro te dejara cortarle las uñas, limpiarle las legañas e incluso revisarle la boca sin temor a que se enfade? Isabel Cárdenas, psicóloga formada en la Universidad de Sevilla y especialista en Conducta Canina, ha compartido en su canal de Ican Adiestramiento Canino un ejercicio fundamental para que los perros se acostumbren a la manipulación sin estrés.

"Quédate si quieres conocer el ejercicio que tu perro debería saber desde ya, porque es crucial para su día a día. ¡Allá vamos!", manifiesta Cárdenas al inicio del vídeo.

El objetivo, según la experta, es enseñar a los perros a dejarse tocar y revisar voluntariamente, desde las patas hasta la boca, pasando por orejas y ojos.

Evita que tu perro se vuelva agresivo con este truco

Isabel explica que este entrenamiento no solo mejora el bienestar del animal, sino que también facilita tareas cotidianas y visitas al veterinario o a la peluquería. Acostumbrar a un perro a la manipulación reduce la ansiedad, refuerza la confianza entre dueño y mascota y previene conductas defensivas o agresivas.

En la demostración, Isabel trabaja con Yeti, un perro que sirve como ejemplo para mostrar la progresión paso a paso. Primero, se toca suavemente la pata y, si el animal no se incomoda, se le premia de inmediato.

La especialista insiste en la importancia de premiar rápido y con trozos pequeños de comida, evitando retrasos que puedan generar nerviosismo. "Si se deja tocar, gana premios; si no, seguimos practicando poco a poco", señala.

El vídeo avanza mostrando cómo se manipulan orejas, ojos, patas traseras, el rabo y la boca, siempre respetando el ritmo del perro. Isabel subraya que sesiones cortas y constantes son más efectivas que largas, y recuerda mantener la correa a mano para controlar la seguridad del animal.

Además de la técnica, la experta ofrece consejos prácticos: no dar órdenes innecesarias, no mostrar el premio antes de tiempo y no cubrir los ojos del perro. Estos detalles son clave para que el aprendizaje sea positivo y no genere estrés.

Cárdenas concluye con un mensaje claro: la paciencia y el respeto al ritmo del perro son esenciales. "Así conseguirás que tu perro no tenga incomodidad y que al día de mañana no muestre conductas agresivas. Además, asociará la manipulación a premios, lo que hará que disfrute la experiencia", afirma.