"Si estás usando vinagre para limpiar la orina de tu perro, solo estás haciendo que quiera volver a orinar ahí", comienza diciendo con contundencia la veterinaria Laura Londoño en los primeros segundos del post publicado recientemente en Instagram.
En dicho vídeo, que ya acumula miles de visualizaciones, Londoño explica que, aunque se trate de una práctica muy extendida en la actualidad, no solo es ineficaz, sino que puede ser contraproducente.
El argumento de la veterinaria se basa en el poderoso sentido del olfato de los perros, que es entre 10.000 y 100.000 veces más agudo que el de los humanos. Aunque el vinagre puede disimular el olor de la orina para las personas, no logra lo mismo con el olfato canino.
"El vinagre puede neutralizar el olor de la orina a nivel superficial, haciendo que huela limpio para ti, pero no para tu perro", señala Londoño.
Según su explicación, el fuerte olor del vinagre, similar al del amoníaco, puede incluso resultar estimulante para el animal, llevándolo a marcar de nuevo el mismo lugar. "Esto puede confundirlos y hacer que quieran orinar ahí nuevamente", advierte.
Además, Londoño desmonta otra creencia popular: la idea de que el vinagre desinfecta y elimina completamente los residuos orgánicos. "Tampoco descompone la materia orgánica ni elimina la urea ni las sales orgánicas. Solamente tapa un poquito el olor", dice.
Esta afirmación se alinea con estudios sobre limpieza de superficies contaminadas por orina, que indican que el vinagre no actúa sobre las moléculas responsables del mal olor persistente.
No obstante, la recomendación de Londoño no se queda ahí, la veterinaria, además, recomienda el uso de productos enzimáticos específicos para mascotas.
"Estos rompen las moléculas de la orina desde la raíz, eliminando el olor de verdad tanto para ti como para él", concluye Londoño.
La publicación ha generado cientos de comentarios de usuarios que reconocen haber usado vinagre durante años sin saber que estaban reforzando el comportamiento indeseado de sus mascotas.
Asimismo, otros agradecen la claridad de la explicación y piden recomendaciones concretas de productos enzimáticos.
La importancia del aprendizaje
Eliminar correctamente el olor de la orina no es solo una cuestión de higiene, sino también una estrategia fundamental para evitar que los perros repitan su conducta de micción en lugares no deseados.
De hecho, usar determinados métodos puede perpetuar el problema y dificultar el proceso de educación del animal.