Tras décadas anclado en una especie de Edad Media sin fin, con la más estricta aplicación de la ley islámica, Arabia Saudí deambula lentamente por una senda de cambio y transformación; una aparente apuesta por el aperturismo en el que el ocio y el espectáculo son protagonistas esenciales. Y en ese proceso una empresa malagueña, Merlín Producciones, se ha convertido en un actor relevante.
El toque de la firma de la Costa del Sol, cuyo papel es igualmente significativo en el nuevo proyecto de formación de Antonio Banderas, está presente en el reino alauita desde hace ahora casi seis años.
Desde aquel primer evento en 2017 hasta la organización en plan superbowl de todo el espectáculo de luz y sonido de la final de la Copa del Rey de Campeones de Arabia Saudí, que enfrenta este viernes al Al Hilal y el Al-Wahda.
"Nos encargamos de la dirección y coordinación del show del descanso", explica a EL ESPAÑOL de Málaga Domingo Sánchez, CEO de Merlín Producciones. Su labor, añade, viene a ser la de coordinar a todas las empresas internacionales que participan en el evento deportivo y que incluye, entre otros elementos, grandes coreografías.
El sello de Merlín no es nuevo, ya que está vinculado al proceso de aperturismo turístico y cultural puesto en marcha por la monarquía de Arabia Saudí a principios de 2017. Desde ese momento, la compañía ha sido capaz de suavizar el estío en la ciudad costera de Yeda con el espectáculo de las fallas, o de organizar una gran competición del videojuego Fortnite.
Domingo Sánchez, en una imagen de archivo junto al equipo de trabajo en Arabia.
Pero el origen del vínculo de Merlín con Arabia hay que encontrarlo en Marbella, en el año 2014. Aquel año, la compañía celebraba los ensayos de un espectáculo de circo contemporáneo con la suerte de que entre el público se encontraba un miembro de la familia real saudí. De aquella semilla inicial brotó una relación que se ha mantenido a lo largo del tiempo y que, por lo que parece, tendrá continuidad.
"Cuando llegamos el entretenimiento estaba prohibido; en nuestro primer espectáculo por un lado estaban los hombres y por otro las mujeres; por un lado los solteros y por otro las familias"
Sánchez explica que desde que la compañía llegó hasta el momento actual el cambio ha sido profundo. "Ahora está muy occidentalizado; cuando llegamos el entretenimiento estaba prohibido; en nuestro primer espectáculo por un lado estaban los hombres y por otro las mujeres; por un lado, los solteros y por otro las familias", explica.
"El plan más ambicioso de infraestructura, turismo y ocio está en Arabia Saudí porque está todo por hacer", cuenta el empresario, quien expone como muestra del cambio en el clima de este país la organización en los últimos años de festivales de cine y de literatura.
Sánchez admite que en los primeros años de su trabajo en Arabia Saudí eran muchos los que le preguntaban cómo podía ir a trabajar a un país tan cerrado. La respuesta era clara: "Venimos a cooperar con esa apertura". "Sentimos que hemos aportado, porque hemos sido partícipes con nuestros partners en Arabia con casi todos los eventos allí, hemos sido pioneros en muchas cosas", remarca.
Y en todos estos años, inciden, han sido testigos de ese cambio social que se ha producido y que sigue dándose. "Hemos visto el cambio, de cuando la mujer no conducía a cuando lo ha hecho, de cuando los espectáculos no estaban permitidos a cuando lo han estado… Hoy Arabia es otro país, ha cambiado muchísimo", remarca.