La modelo, apodo con el que era conocida una narcotraficante colombiana que desde Marbella suministraba droga a toda Europa, acaba de ser condenada por la Audiencia de Málaga a cinco años de cárcel. La ahora condenada era la que mantenía reuniones y "fuertes" contactos con el resto de integrantes de la red.
La sentencia de la Sección Tercera de Málaga se dicta tras expresar los procesados su conformidad con la acusación del ministerio fiscal por los delitos contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal. En otra resolución de la misma Sala se condena a otro acusado más, también por los mismos delitos.
Según se declara probado en las sentencias, a las que ha tenido acceso Europa Press, las primeras informaciones fueron proporcionadas inicialmente a través de los enlaces oficiales policiales por la Oficina AntiEstupefacientes Francesa a los grupos especiales de investigación en el tráfico de sustancias estupefacientes (Udyco y Greco Costa del Sol).
Se informaba de la existencia en la zona de la Costa del Sol de un grupo de personas de origen tanto colombiano como español, en un principio, y después de contactos que también tenían con ciudadanos polacos asentados en el término municipal de Marbella y sus alrededores, y de ciudadanos daneses asentados en Barcelona y sus cercanías.
El objetivo era "conseguir la ilícita introducción/transporte de sustancias estupefacientes desde Marbella a lugares del Este y Norte de Europa", señalan las resoluciones, que ya son firmes en ambos casos.
Una vez que los agentes especializados comienzan a llevar a cabo en los últimos meses del año 2020 la investigación de las citadas personas, se centran en principio en la persona de la principal acusada, nacida en Colombia.
Alto nivel de vida
Esta ya había sido investigada con anterioridad y sus parejas sentimentales anteriores "habían estado involucradas en el tráfico de drogas", entre ellos uno investigado en esta causa que no fue acusado al encontrarse declarado en rebeldía procesal por estar en ignorado paradero.
Pese a que a esta acusada "no le consta actividad laboral acreditada alguna", vivía en un chalé en una urbanización de lujo de Marbella, con un valor catastral superior a los 1,1 millones de euros, con piscinas, jardines de más de 3.000 metros cuadrados, y gastos de mantenimiento, agua, luz y demás "de una cantidad muy elevada", cuya titularidad registral recae en una sociedad panameña.
La investigación llevó a que la acusada tenía "fuertes contactos y vínculos con varios de los investigados", con lo que mantuvo reuniones entre finales del año 2020 y comienzos de 2021. La finalidad no era otra que elaborar y distribuir sustancia estupefaciente de diversos tipos, "estableciéndose entre ellos un reparto de la logística y transporte necesaria".
Asimismo, se considera probado que tras las vigilancias y seguimientos realizados se detectaron transportes y maniobras "anómalas" de los acusados relacionadas con el tráfico de estupefacientes.
La principal condenada, de 50 años, fue detenida el 20 de septiembre de 2022 en su vivienda de lujo, en el que los investigadores se incautaron de 12 paquetes de resina de cannabis-hachís y un paquete con el anagrama 'RR Royce' de una sustancia prensada y compactada que era cocaína, con un peso de 977,20 gramos y un valor de 103.086 euros.