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Las claves

Francisco de la Torre tiene el propósito de poner en marcha la construcción del Auditorio de la Música antes de finalizar el que podría ser su último mandato como alcalde de Málaga.

Este equipamiento cultural, que se puso sobre la mesa por vez primera hace ahora casi dos décadas, se ha convertido en su dilatada trayectoria municipal en una especie de asignatura pendiente que quiere empezar a resolver el año que viene.

Con este objetivo, el regidor ha confirmado su intención de licitar en 2026 las obras de un complejo tasado en unos 210 millones de euros. Un paso adelante que pretende dar incluso sin el apoyo económico del Gobierno central.

De la Torre ha vuelto a denunciar la decisión del Ministerio de Cultura de "ponerse de perfil en este asunto". Son varias las ocasiones en las que el departamento ha cerrado la puerta a su participación económica.

Pese a ello, el mandatario ha confirmado este miércoles, en el acto de presentación de las cuentas municipales para 2026, que quiere poner en marcha el concurso de las obras a lo largo del próximo ejercicio.

De acuerdo con sus explicaciones, la acción planteada es de gran envergadura y complejidad. Por el momento, en ausencia del Gobierno, De la Torre cuenta con los 25 millones comprometidos por la Junta de Andalucía, los 10 de la Diputación provincial, y los 20 que aportará con seguridad el Consistorio.

¿Qué ocurre con los otros 150 millones de euros? El alcalde ha relacionado este dinero con una importante operación de crédito a afrontar el año que viene con una o varias entidades financieras.

De este modo, el Consistorio estaría en disposición de adelantar los 45 millones que debería aportar Cultura y la parte que el regidor quiere que asuman socios privados, que podrían pagar en unos 5 años.

Patrocinio privado

Hay que recordar que el propio De la Torre ya habló hace meses de que unos 110 millones pudieran ser aportados por entidades privadas. Una de las vías analizadas es la de vender por entre 40 y 50 millones de euros el nombre al Auditorio en favor de alguna compañía.

Este camino viene siendo largamente recorrido desde hace años en el ámbito deportivo, donde son muchos los estadios que cuentan con el patrocinio directo de una multinacional. Ejemplo de ello es el TD Garden, que acoge a los Boston Celtics, o el Crypto.com Arena de los Lakers.

Más allá de la búsqueda de un gigante empresarial, el alcalde hablaba de repartir el resto de la financiación privada entre 20 y 30 empresas colaboradoras, a razón de dos o tres millones cada una.

El futuro Auditorio, cuyo diseño fue actualizado, estaría conformado por cinco piezas separadas y con tipologías estructurales distintas.

Dependiendo de la configuración de la Sala Principal, ya sea para ópera o para usos como auditorio, las butacas oscilan entre 1.622 y 1.905. Asimismo, la Sala de Música de Cámara tiene una variable configuración de las 465 butacas de ocupación máxima a las 75 butacas de ocupación mínima.