El proceso de transformación en el que está instalado el popular barrio de Carretera de Cádiz, en Málaga capital, sigue imparable.
Al cierre de los numerosos chinos instalados en la zona, cuyo vacío ha sido ocupado por enormes promociones residenciales, hay que sumar ahora la mutación que afecta a los concesionarios de coches.
El último ejemplo de este proceso son las antiguas naves de Peugeot, situadas en el cruce de la Avenida de Velázquez con la Avenida de los Guindos.
Perdido el uso original para el que fueron levantadas, se avecina un nuevo uso completamente alternativo: gimnasio y oficinas.
Este es el proyecto impulsado por la cadena VivaGym para este inmueble, que cuenta con una superficie construida de unos 5.000 metros cuadrados.
La operación empieza a dar sus primeros pasos tras recibir el visto bueno por parte de la Gerencia de Urbanismo a la concesión de una licencia de uso provisional. Así consta en el informe emitido por el departamento de Planeamiento fechado el pasado 16 de junio.
En el mismo se autoriza la posible implantación de un gimnasio y de un espacio de oficinas, pero se rechaza otra de las opciones manejadas por la promotora, la de un supermercado.
De acuerdo con los documentos oficiales consultados por EL ESPAÑOL de Málaga, el proyecto de intervención reserva algo más de 1.500 metros cuadrados construidos para el gimnasio.
Una superficie que se reparte en planta baja, donde quedarán localizadas salas de spinning, cardio, TOS, hit box, peso libre gran impacto, peso libre ligero y The Box Club, y entreplanta.
El aforo previsto es de 294 personas. Asimismo, se plantean 32 plazas de aparcamiento.
La parte de oficinas contará con 1.749 metros cuadrados construidos. En este espacio se delimitan tres áreas de trabajo, de 226, 252 y 124 metros cuadrados, respectivamente; 21 salas de reuniones de unos 8 metros cuadrados; tres salas polivalentes (de unos 35 metros cuadrados) y otras tres salas de consejo, de unos 30 metros cada una.
En este caso, el aforo contemplado es de 438 personas. Dispondrá además de 40 plazas de aparcamiento.
Para adecuar la nave de Peugeot a los nuevos usos pretendidos, la empresa contempla una inversión que ronda los 610.000 euros. De ellos, 274.519 euros corresponden a la intervención del gimnasio y los 315.693 a la parte de las oficinas.
