Un informe elaborado por el portal Idealista confirma la hemorragia del mercado del alquiler de larga duración en Málaga. De acuerdo con los datos de esta entidad, que analiza la situación en otras grandes ciudades, en los últimos cuatro años han salido del mercado del orden de 7.000 viviendas destinadas en origen al arrendamiento tradicional.

Siendo general este fenómeno, Idealista constata que Málaga es la ciudad que refleja la mayor tensión del mercado residencial. "Con los últimos datos disponibles, el stock de alquiler permanente había perdido casi 7.000 viviendas entre 2020 y 2024", destacan los responsables del trabajo, que apuntan que la oferta de alquileres de temporada aumentó en 173 unidades.

Mientras el desplome del alquiler tradicional es taxativo, se ha disparado en este intervalo el alquiler turístico, con casi 3.500 inmuebles más. Esto implica que viene a suponer casi la mitad de la oferta que ha perdido el alquiler permanente.

Idealista valora el comportamiento del mercado residencial en la capital de la Costa del Sol, con operaciones de compraventa de vivienda usada que oscilan entre las 6.000 y las 7.000 unidades anuales. El dato de 2022, con 7.122 operaciones, fue el segundo mejor de la serie desde 2006.

A estos detalles se suma que hay un 6,3% del parque de viviendas de la ciudad que está vacío, mientras que hay 5.000 inmuebles que cuentan con el consumo energético de solo un mes de uso.

La salida masiva de viviendas del mercado de alquiler tradicional ha generado una reducción de la oferta que, como efecto inmediato, trae consigo una elevación extraordinaria de los precios.

Los datos más recientes de Idealista sitúan el valor medio del metro cuadrado en arrendamiento en 15,4 euros, un 8,5% más que hace un año. Utilizando este parámetro, el alquiler mensual medio de una vivienda tipo de 80 metros en la capital de la Costa del Sol ronda ya los 1.232 euros.

Pero ¿cuál era la situación hace cinco años? A mediados del año 2020, cuando el impacto de la pandemia de la Covid era total, el precio del metro cuadrado en alquiler alcanzaba en Málaga los 10,2 euros.

Es decir, un 51% menos que ahora. O lo que es lo mismo. Si en junio de 2020 se pagaban 816 euros por un piso de 80 metros, ahora son 416 euros más.

Sangría en las grandes urbes

Las cifras de Idealista vienen a confirmar la sangría que lleva sufriendo el stock de vivienda en arrendamiento a nivel nacional. En concreto, ha detectado un descenso del 56% en el producto que ofrece el portal inmobiliario desde finales de 2020 hasta finales de 2024.

"Cuatro años en los que arrendar una casa se ha transformado en algo parecido a participar en el casting de una película, con una demanda disparada y unos precios de las rentas que van acumulando récords mes tras mes para ponérselo cada vez más difícil a las familias que buscan una casa donde vivir de forma permanente", destacan.

A juicio de los expertos del portal, las viviendas turísticas y el alquiler temporal se han convertido en una especie de "chivo expiatorio" ante estos problemas de acceso a la vivienda en arrendamiento en España.

Los datos de idealista/data y de AirDNA, la plataforma de análisis de datos de los principales portales de alquiler turístico, como Airbnb y Vrbo, confirman que no son ni los únicos ni los principales causantes de la pérdida de viviendas en el mercado del alquiler tradicional.

Sin embargo, hay otros factores clave, como la decisión del Gobierno central de intervenir en el mercado con la modificación de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), la limitación de la subida de los precios en la renovación anual de los contratos…

Idealista analiza la situación en cuatro grandes urbes, valorando como preocupante el estado en Barcelona, Madrid, Valencia y Málaga. "Estos importantes polos económicos y sociales han perdido buena parte de su oferta de viviendas en alquiler habitual", concluye. De todas las urbes, en Barcelona la caída ha sido del 84% del stock, con más de 40.000 viviendas menos en el mercado.

Le sigue Madrid, con un 71% menos, por delante de Málaga (-64%) y Valencia (-63%), mientras la demanda sigue presionando y los precios no paran de aumentar, firmando rentas récord en todas estas ciudades.