Ni la lluvia ha sido capaz de frenar al Metro de Málaga durante la pasada Semana Santa. Pese a que los aguaceros han deslucido el normal desarrollo de las procesiones, obligado a más de una veintena de tronos a quedarse en sus casas hermandad, los malagueños han hecho un uso masivo del suburbano, hasta el punto de crecer la demanda respecto al año pasado.
De acuerdo con los datos aportados por la Junta de Andalucía a EL ESPAÑOL de Málaga, entre el Viernes de Dolores y el pasado Domingo de Resurrección son 600.299 los viajeros que se han subido a los trenes del ferrocarril urbano, buena parte de ellos para acudir a ver las procesiones.
El registro de este año aumenta un 16,11% sobre la Semana Santa del año pasado que, hay que recordar, ya se benefició de la llegada del trazado hasta la Alameda Principal. Bien es cierto que ese ejercicio se optó por explotar la estación Atarazanas sólo para la salida de pasajeros, impidiendo la llegada en determinadas franjas horarias. En los momentos punta de la tarde, los trenes llegaban hasta la estación Guadalmedina, obligando a los usuarios a continuar a pie hasta la Alameda.
Si es significativo el crecimiento de un año a otro, más lo es si se toma como referencia 2022, periodo previo a la extensión del trazado hasta el Centro. Respecto a esa Semana Santa, en la que la estación más próxima al casco histórico era la de El Perchel/María Zambrano, la cifra se dispara un 232%. La Consejería de Fomento subraya que pese a las inclemencias meteorológicas, es el mejor dato de la serie histórica del Metro, que entró en servicio en agosto de 2014.
Las jornadas de mayor afluencia se registraron el Martes y el Jueves Santo, con 86.867 y 92.091 usuarios transportados, respectivamente. Por contra, el día de menor demanda fue el Domingo de Resurrección, con 19.231 viajeros, día marcado por la lluvia y la suspensión de la única procesión prevista. El promedio diario de viajeros en este periodo se ha situado en algo más de 60.000 usuarios por jornada.
Como viene siendo habitual, el suburbano adscrito a la Agencia de Obra Pública ha dispuesto de servicio especial para esta Semana Santa, que ha contemplado una ampliación horaria, mejora en los intervalos de paso de los trenes, y refuerzo de personal y vigilancia en estaciones y unidades.
Las estaciones que registraron mayor afluencia de viajeros fueron las de Atarazanas y Guadalmedina, que constituyen las paradas más próximas al lugar por el que se desarrolla la mayor parte de los recorridos procesionales de las cofradías. Tras éstas, las estaciones más demandadas fueron El Perchel, Ciudad de la Justicia y Palacio de los Deportes.
A lo largo de la pasada semana, la flota de trenes del suburbano malagueño ha recorrido alrededor de un 15% más de kilómetros que en una semana de servicio convencional. Y ello como consecuencia de que la explotación ha incluido un servicio ininterrumpido de 68 horas entre la mañana del Miércoles Santo y la madrugada del Viernes al Sábado Santo. A esto hay que sumar que el operativo especial extendió el servicio hasta las 2.30 horas de la madrugada en las jornadas del Domingo de Ramos, Lunes y Martes Santo.